Unos 24,000 refugiados afganos huyeron de Pakistán en enero, acosados por las medidas de un plan de acción antiterrorista implantado tras un mortífero ataque a una escuela. A MAJEED AFP/GETTY IMAGES
Unos 24,000 refugiados afganos huyeron de Pakistán en enero, acosados por las medidas de un plan de acción antiterrorista implantado tras un mortífero ataque a una escuela y que ha forzado en un mes la salida de casi tantos de ellos como en el 2014, informaron fuentes oficiales.
“El incremento se debe a los recientes incidentes de seguridad en Pakistán, particularmente al ataque al colegio de Peshawar el 16 de diciembre”, dijo un portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Afganistán, Matthew Graydon, para referirse al atentado que causó 151 muertos en el noroeste del país.
En medio de la creciente tensión, las fuerzas de seguridad paquistaníes realizaron redadas en las casas y lugares de trabajo de los refugiados afganos, que comenzaron a abandonar el país en masa ante la extorsión y el acoso que sufrían, según denuncia la OIM.
Las cosas tampoco serán fáciles a su vuelta a Afganistán, donde deberán reintegrarse económica y socialmente tras dos décadas fuera del país.
El regreso de miles de refugiados empeorará además el “problema de desempleo” que sufre el país islámico, donde de los 12 millones de personas en edad de trabajar, 4.5 están en paro, advirtió el portavoz del Ministerio afgano de Trabajo Ali Eftekhari.
El “significativo e inesperado” aumento en el número de personas que están cruzando la frontera es desbordante para la OIM, que ha tenido que limitar su ayuda a un 10 por ciento de las familias.
Tampoco el Ejecutivo afgano está preparado para afrontar la situación, aseguró a Efe el portavoz del departamento de Refugiados Islamuddin Jurat.
El vocero adelantó que su Gobierno se reunirá esta semana con Pakistán para buscar una solución “legal” al problema, mientras que hoy organizaciones de derechos humanos pidieron, por su parte, la mediación de Naciones Unidas.
“Queremos que la ONU, el Gobierno afgano y el paquistaní encuentren una solución conjunta para el problema y le pongan fin al acoso que sufren en la actualidad los refugiados afganos”, manifestó a Efe Maisam Ehsani, de la Red de Jóvenes Activistas.
Como parte de su plan de acción antiterrorista, Pakistán aprobó la creación de tribunales militares, levantó la moratoria a la pena de muerte, arrestó a más de 10,000 personas por diferentes delitos e intensificó la ofensiva militar contra los insurgentes en el noroeste del país, fronteriza con Afganistán.
Fuente: EFE
