Una reunión para discutir ciertos aspectos sobre la lucha contra el contrabando, se llevó a cabo este lunes en el Cuartel Bolívar de la ciudad de San Cristóbal en el estado Táchira, entre autoridades venezolanas y colombianas, quienes coincidieron que el cierre parcial de frontera a contribuido a desmantelar grupos criminales dedicados a dicho flagelo.
El jefe de la Región Estrategica de Defensa Integral Los Andes -Redi-, General Efraín Velasco Lugo, informó que del 12 de agosto al 10 de septiembre han sido retenidas en los estados andinos mil 300 toneladas de productos de todo tipo, mientras que en Táchira han sido 614 toneladas.
Anunció que hoy fueron relevados 175 efectivos de la Brigada de Paracaidistas, quienes estuvieron en frontera durante 45 días. «Llegan 240 efectivos que vienen de otras brigadas del país», acotó.
Precisó que en los estados andinos se han retenido 135 personas por actividades ligadas presuntamente con el contrabando, entre ellos más de 35 ciudadanos extranjeros, a quienes le están evaluando el regreso a sus países de origen.
Informó que el pasado fin de semana visitaron durante un operativo los grandes supermercados de la ciudad de San Cristóbal, donde detectaron a ciudadanos colombianos sin identificación haciendo compras, y trabajadores de dichos centros de venta colaborando con estas acciones.
Estructuras criminales
Por su parte el director de la Policía Fiscal y Aduanera de Colombia, Gustavo Moreno Maldonado, informó que durante esa reunión revisaron algunos puntos de tareas pendientes, y resultados de las acciones que han desarrollado de manera bilateral, como es el reconocimiento de los pasos ilegales a través de los 219 kilómetros de frontera, por parte del Ejército venezolano y la Policía Fiscal Aduanera de Colombia.
Informó que atacarán seis estructuras criminales dedicadas al contrabando que apuntan a entes centralizados y al tráfico de hidrocarburos, medicamentos, alimentos, ganado, entre otros.
«En la medida que logremos atacar esas estructuras con esos sistemas de economía criminal, estamos atacando el epicentro de la violencia en Colombia que tiene un fondo económico, porque son narcotraficantes y diferentes estructuras ilegales de contrabandistas, de extorsión, que quieren el factor dinero. El contrabando es una herramienta que están utilizando para el lavado de activos», explicó.
Expresó su satisfacción porque desde el cierre parcial de frontera el sector arrocero en el vecino país, duplicó sus ventas en la ciudad de Cúcuta. En cuanto al combustible, precisó que el legal ya puede competir porque es más caro. Por ello está seguro que el trabajo del Ejército venezolano en la zona fronteriza ha sido exitoso, a pesar de que aún hay pasos ilegales.
Moreno Maldonado indicó que hay íconos de ilegalidad en Colombia como lo son: el barrio La Parada y en Centro Comercial Alejandría en Cúcuta. «Se convierten en íconos de ilegalidad, que hacen parte de esa cadena de contrabando que tenemos ya identificada, que tienen el ingreso al país en transporte de empresas que se dedican al contrabando, en centros de acopio y comercialización», agregó, al tiempo que destacó que en su país se necesita un trabajo interinstitucional, para desde una óptica de Estado apuntar a desmantelar estas zonas.
Afirmó que se está discutiendo una Ley Anticontrabando en el Congreso colombiano, con la cual esperan endurecer las medidas contra este flagelo.
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