Miguel Ignacio Purroy es el presidente de Bancaribe, institución financiera fundada en Puerto Cabello, próxima a cumplir 59 años en el mes de noviembre. En el año 2009 el banco estrenó su sede en el Centro Galipán, en El Rosal, con un diseño arquitectónico moderno, ecológico y de alta tecnología.
-En sus instalaciones hicieron énfasis en el concepto de que todo el mundo vea lo que todo el mundo hace y en la comodidad de los trabajadores, promueven el trabajo en equipo y especialmente fomentan la comunicación interna. ¿Cuáles medios internos usan y por qué es importante que el empleado esté cómodo en su puesto de trabajo.
-La sede intenta reflejar lo que somos, a través de su concepto arquitectónico, un banco sencillo y sobrio, sin lujos, todo muy funcional, somos un banco serio, maduro y respetado. La sede es un medio de comunicación en sí misma, con espacios abiertos, transparentes, la transparencia es un valor corporativo fundamental para nosotros, es la forma como ganamos confianza entre los clientes y como generamos confianza entre nosotros mismos, esa transparencia aumenta la comunicación. En cada piso tenemos un área de café para reuniones informales, para el intercambio grato y relajado, las paredes son de vidrio que se convierten en grandes pizarras para los colaboradores que anotan allí ideas y objetivos. De esta manera los equipos siempre están integrados. Todo el edificio fomenta la comunicación y la confianza.
-¿Qué tan importante es para Bancaribe el desarrollo integral del trabajador?
-El capital principal del banco es la gente, somos un negocio de servicio y el servicio lo presta la gente, si nuestra gente no se destaca, no se diferencia y así difícilmente puede destacarse el banco. Dentro de nuestro marco filosófico, uno de los valores es el crecimiento profesional, buscamos crear el ambiente propicio dentro del banco para que crezcan en lo personal y lo profesional a través de la capacitación y a través de programas para mejorar su calidad de vida con herramientas de manejo de estrés y mejoras de comunicación en el entorno familiar. En la medida en que la gente esté bien en su ambiente familiar lo estará también en el ambiente laboral. Nosotros decimos que en Bancaribe somos una gran familia, eso es extremadamente positivo para el banco.
-¿Cuáles son las líneas de acción en los programas de Responsabilidad Social Empresarial?
-Tenemos una comprensión de nuestra razón de ser como un ente que tiene un gran deber hacia la comunidad, basados en principios éticos. Como corporación tenemos grupos de interés, los stakeholders, un colectivo al cual nos debemos, formado por los empleados, clientes, proveedores, accionistas, la comunidad y el estado y las autoridades. Para cada grupo el banco ha desarrollado iniciativas de Responsabilidad. Por ejemplo, para los proveedores tenemos una serie de normas éticas para asegurarles un acceso justo y equitativo para las oportunidades de negocios con nosotros. Con los clientes tenemos muchas iniciativas, con énfasis en la educación financiera; con los empleados hay una lista larga de programas que empiezan con lo básico que puede tener todo contrato colectivo hasta programas de desarrollo profesional. Dentro de los grupos de interés está la comunidad, la Responsabilidad Social Empresarial para nosotros está enmarcada en la Responsabilidad Corporativa, estamos creando una figura, un comité de Responsabilidad Corporativa donde está la más alta dirección del banco para velar que esa responsabilidad se manifieste en cada una de las actuaciones de la institución. Entrando más en el aspecto de comunidad como grupo de interés, tenemos cuatro líneas de acción: música, divulgación de la historia, economía popular y solidaridad Bancaribe.
Con respecto a la Música Bancaribe, tenemos una alianza de larga data con el Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela, hacemos festivales anuales de música con el maestro Gustavo Dudamel, a quien hemos visto crecer en el Sistema; adelantamos programas de música en las escuelas de bajos recursos, con una actividad coral para que los niños se inicien en la música, organizamos el festival anual de coros infantiles y tenemos programas de dotación de instrumentos y ofrecemos préstamos para adquirirlos.
En cuanto a la divulgación de la historia, Bancaribe fomenta el conocimiento de la historia de Venezuela a través de publicaciones editoriales, el Premio Rafael María Baralt y las olimpíadas de historia en las escuelas de La Vega. Por qué lo hacemos, porque un país debe tener memoria de sí mismo para poder proyectarse hacia el futuro.
Bancaribe apoya a la economía popular a través de Bangente, filial del banco. A finales de los 90 el banco creó Bangente, iniciativa pionera en cuanto a la atención del empresario popular, especialmente con los créditos. Al lado de Bangente existe la Fundación Bangente por donde canalizamos el apoyo al emprendedor con cursos y capacitación en diversas materias como leyes, contaduría y atención al personal.
Con el programa Solidaridad Bancaribe se enmarcan otras actividades, alianzas con organizaciones sociales y se inserta el voluntariado. En nuestro plan de negocio y en nuestro sistema de evaluación de desempeño de nuestra gente tenemos un ítem que se relaciona con las horas de voluntariado, de forma tal que para cumplir con las metas no solo hay que cumplir con el trabajo sino también el participar en el voluntariado forma parte del indicador de gestión. Eso ha tenido un efecto multiplicador increíble, participan los familiares de los empleados también.
-¿Cuáles son los principales proyectos a futuro de Bancaribe?
-Estamos innovando permanentemente. Crecemos con nuestros clientes, atendiendo sus necesidades. Ponemos acentos en las líneas de negocios que ya están abiertas, para mejorarlas, como banca personal, de consumo, gente joven. Seguiremos innovando.
Es difícil decir que tenemos una línea nueva. El tamaño de Bancaribe es mediano lo que nos permite una mayor cercanía con el cliente, a quien nos debemos.
Fuente: El Universal








