Hacía quince años que Venezuela no se metía en la carrera de los Premios Goya, los más prestigiosos del cine español, pero Ferrari lo ha conseguido este año con “Azul y no tan Rosa”Esta pequeña joya salpicada de guiños al cine de Pedro Almodóvar, de quien el venezolano se declara “devoto”, le ha hecho saltar una vez más a los titulares de la prensa española. La primera vez fue por el éxito rotundo y unánime de su película “Pelo malo” en el Festival de San Sebastián y ahora el turno es de “Azul y no tan rosa”; una tragicomedia tan real como la vida misma. Reseño Notitarde
“‘Pelo malo’ me pareció genial”, señala Ferrari en una entrevista con EFE, realizada tras una proyección de la película en la Academia del Cine, en Madrid, que fue muy aplaudida.
“Azul y no tan rosa” gira en torno a la relación de un padre y un hijo que se reencuentran y necesitan solucionar sus diferencias; es, según su director y guionista, “una historia sobre el amor, la amistad, la familia en su sentido más amplio y sobre todo lo que se considera diferente”.
El venezolano Guillermo García es Diego, un fotógrafo de moda, homosexual, que tiene un hijo, Armando, nacido durante su época del instituto, cuya madre, que vive en España, le envía una temporada a Caracas; al mismo tiempo que el chico llega a su vida, su pareja, un ginecólogo, sufre una tremenda agresión que le deja en coma.
La cinta es también una denuncia contra la homofobia, la intolerancia y también contra el sistema -en la cinta aparecen también las trabas policiales y judiciales-, sustentada por unos sólidos personajes.
El venezolano reconoce que le haría “muchísima ilusión” ganar el Goya, aunque se apresura a decir que no la hizo “para eso, sino para el espectador que quiere ponerse en el lugar de otro: la hice para el público”.
Coproducida por el Centro Nacional de Cinematografía y la española Malas Compañías P.C., con el apoyo de Ibermedia, la venezolana compite con la hispanomexicana “La jaula de oro”; la chilena “Gloria” y la argentina “Wakolda. El médico alemán” el próximo 9 de febrero en Madrid
Fuente OC