En 2008, desde que llegó a los Tigres de Detroit, Miguel Cabrera ha sido el bateador más consecuente de la organización bengalí. Es por ello que no es de extrañar que el criollo se encuentre también entre los mejores toleteros históricos del equipo.
Cabrera llegó al juego de ayer (ante los Astros de Houston) a los 1000 hits conectados con la camisa de los Tigres, convirtiéndose en el jugador número 30 en conseguir el millar de imparables con ese club y el primer venezolano en hacerlo.
Magglio Ordóñez quedó muy cerca (989 incogibles), pero solo once hits lo separaron de la cifra redonda al momento de anunciar su retiro.
Además, entre los lideratos de por vida de los Tigres, Cabrera marcha segundo en OPS con .981, solo siendo superado por Hank Greenberg, que terminó con 1.028 puntos.
El partido de ayer significó otra cosa importante para el maracayero: aumentó su racha a 21 encuentros consecutivos llegando a las almohadillas.
Para Cabrera hacerlo no es algo difícil. Ayer marchaba con el segundo mejor average (.371) y el cuarto mejor porcentaje de embasado (.446) de las Grandes Ligas.
En la pasada serie de tres juegos el antesalista hizo desastre ante el pitcheo de los Mellizos con trío de hits (uno doble y otro jonrón) y par de boletos, lo que llevó a los brazos de Minnesota a alabarlo.
«Incluso cuando estás por encima en la cuenta 0-2, sientes como si el próximo pitcheo fuera el primero del turno», comentó sobre Cabrera el lanzador Scott Diamond.
Fuente: Líder en deportes