Parece que el verano llegó temprano para Michelle Obama. Mientras muchas personas se congelan alrededor del mundo, la ex primera dama y su hija mayor Malia viajaron a Miami Beach para broncearse un poquito, con motivo del cumpleaños número 54 de Michelle.
En un ‘all girls trip’ y sin Barack presente, madre e hija lucieron bikinis blancos que combinaban entre ellos.
Michelle complementó su look con unos shorts a la cintura color blanco debajo de los cuales escondió su marcado abdomen.
EF