Tras una semana de reuniones entre representantes de sectores productivos y miembros del Ejecutivo, el ministro de Finanzas hace un balance positivo. De unas 3.200 empresas que habían solicitado divisas y estaban a la espera de las liquidaciones, ya casi 2.000 han sido atendidas.
Según Nelson Merentes,se ha logrado una reducción de más de 60% en los tiempos de atraso en la entrega de divisas, lo cual ha sido posible gracias a los encuentros sostenidos con miles de empresarios del sector privado.
En declaraciones a Televen el ministro dijo que «cada empresa o cada sector ha presentado una problemática, tenemos como una matriz de problema y estamos construyendo la matriz de solución».
Indicó que el empresariado ha dicho que «si le dan más facilidades y se quitan ciertas cosas burocráticas y tiene los recursos a tiempo, van a producir».
Esta semana, según anunció, seguirán las reuniones, pero esta vez con representantes del sector primario.
Asimismo aclaró que no está descartado el mecanismo de subasta de divisas vía Sicad (Sistema Complementario de Administración de Divisas).
De hecho, reiteró que el Sicad atenderá a pequeñas y medianas empresas que no necesariamente deben estar inscritas en el Registro de Usuarios del Sistema de Administración de Divisas. «Vamos a flexibilizar ese hecho» dijo al recordar que en la única subasta hecha ese era un requisito para participar.
«Cadivi atiende a un sector de la economía que es bastante grueso, casi 90% de la economía, pero hay un sector que no y tenemos que buscarle respuesta a esto», por lo que el Sicad se abre como opción.
Además dijo que también se revisa el tema de las cartas de crédito planteadas en la primera operación del Sicad.
«Mientras más dinero se le meta a la economía el mercado paralelo tiende a normalizarse».
Negó que haya escasez de divisas. «En momentos podemos tener reservas (internacionales) líquidas un poco por debajo del nivel que los expertos sugieren», pero esto se puede compensar con transferencias del Fonden o del Fondo Chino-Venezolano. «Tenemos vasos comunicantes».
Fuente: El Universal