Daniel Scotto, representante de Médipro, se instaló este domingo con un equipo de cuatro médicos en Achupallas, uno de los sectores más afectados por el fuego a principios de mes.
La Quinta Región de Chile comienza a quedarse sola tras más de dos semanas de abordaje total y ayuda por parte de ONG’s, grupos de voluntarios, instituciones y los propios ministerios del gobierno de Chile.
Este domingo, un grupo de médicos venezolanos que integran Medipro, la primera clínica criolla fundada en Santiago de Chile, llegó a Achupallas, una de las comunidades más afectadas por las llamas en Viña del Mar.
El lugar, hasta la semana pasada atestada de móviles sanitarias y equipos adscritos a la municipalidad y al propio Ministerio de Salud empieza a adolecer por la ausencia de profesionales en terreno para ofrecer atención primaria y especializada.
La avanzada, conformada por Madelein Morales, dermo-pediatra, Sergio Beltrán, nefrólogo; Rebeca Cordero, cirujana y Fernalis Cárdenas, médico general, atendió a decenas de personas que requerían atención.
El equipo de Medipro liderado por Daniel Scotto, en coordinación con líderes vecinales y representantes de la Red de Apoyo Solidario, OrientaMigra y Crónicas de Chile, quienes lideran la #OperaciónTeQuieroChile, arribó con algunos insumos médicos, alimentos y parte de su estructura para ofrecer apoyo profesional. La acción muestra el apoyo y espíritu colaborativo de la comunidad venezolana con el único objetivo de aportar.
En el lugar, representantes del Ministerio de Salud agradecieron el respaldo y coordinaron con Scotto para validar cada una de las recetas e indicaciones de los galenos a los pacientes.
Luego de los incendios, en el sitio, se asentaron profesionales de la Ruta Médica, programa asistencial de la Municipalidad de Viña del Mar, con Ender Guillén, médico merideño a la cabeza. Esto genera que los habitantes del sector muestren empatía y sumo agradecimiento con los galenos nacidos en Venezuela.
VF