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María Gabriela y el chavismo pop

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María Gabriela y el chavismo pop

La hija más mediática de Hugo Chávez fue el enlace entre los músicos y su padre para inyectar energía a la campaña electoral. Su interés por la farándula queda en evidencia en las redes sociales

La idea fue de María Gabriela y a Hugo Chávez le gustó. La campaña ya había comenzado; el mandatario, limitado por su enfermedad, se enfrentaba con Henrique Capriles Radonski, un candidato más joven que se había propuesto recorrer, casa por casa, todos los estados del país.

Con pocas opciones distintas a caravanas en un camión y concentraciones en grandes ciudades, el líder de la revolución bolivariana le puso un inédito ritmo pop a sus discursos. Los Cadillac’s, Hany Kauam y Omar Enrique cerraban sus mítines con un tema musical que llevaba el encuentro hasta el clímax: “Chávez, corazón del pueblo”.

Aprovechando la estrategia de rejuvenecer la campaña presidencial queestableció Jorge Rodríguez, jefe del Comando Carabobo, María Gabriela Chávez –segunda hija del fallecido presidente– contactó a Rubén Eduardo Hernández, ex manager de Kauam, compositor de la canción. El representante musical es hijo de Rubén Hernández Remón, esposo de la periodista Tania Díaz, ex presidente de VTV y diputada del PSUV. Los Hernández tienen una vieja amistad con la familia de Jorge Arreaza, vicepresidente de la República y esposo de la hija mayor de Chávez, Rosa Virginia.

“En una oficina, Rubén, María, Hany y nosotros armamos el tema. Se lo presentamos a Jorge y le gustó mucho. Nos dijo que sólo faltaba que el Presidente lo escuchara. Me imagino que María Gabriela le llevó el demo a su papá y lo aprobó. Ella fue la madrina de todo esto”, recuerda Luis Fernando Romero, miembro de Los Cadillac’s. Su compañero, Emilio Vizcaíno, también reconoce que la joven fue el puente entre los artistas y el chavismo. Si cobraron o no por ese “puente” es una incógnita que el dúo prefirió no aclarar. Para ellos el apoyo al Presidente era lo más importante.

María Gabriela es la más expuesta de los hijos de Chávez. Mientras sus hermanos Rosa Virginia, Hugo y Rosinés no hacen públicas sus opiniones ni se conoce mucho de su vida personal, ella es una activa usuaria de las redes sociales (Twitter e Instagram) en las que mezcla lo político con lo sentimental, conversa con amigas, responde a quienes la critican, envía mensajes de amor a su familia, de admiración a su padre y hace retweets de temas de superación personal. La comunicadora social, que en Twitter tiene más de 650.000 seguidores, compartió con su hermana mayor el rol de primera dama del país.

“María Gabriela nos pidió poner energía a la campaña, acompañar la travesía de la enfermedad de él. No nos imaginamos el éxito tan rotundo de ‘Chávez, corazón del pueblo’. Pero más allá de esto, ella nos ayudó a dejar el miedo, a romper el tabú, a atrevernos a exponer nuestra posición política, nosotros tenemos dignidad”, expresa Romero.

El enérgico tema y los músicos fueron heredados por Nicolás Maduro,

pero no así el efecto que tuvieron al principio. “Todo lo que se esperaba como impacto y consecuencia de la presencia de los artistas en la campaña de Maduro no se logró desde el punto de vista cuantitativo. El resultado electoral habla por sí mismo. Somos conscientes de que ellos contribuyeron, pero no está claro cuál es el peso de esa contribución”, señala el politólogo Nicmer Evans. de esto, considera que es bueno que la revolución bolivariana tenga un staff de artistas: “Cualquier político siempre desea rodearse de gente de diversos ámbitos de la vida nacional”. La relación es simbiótica: cualquier artista desea rodear a un político con poder.

El director del Grupo Actoral 80, Héctor Manrique, considera que los artistas tienen derecho de expresar su posición política siempre y cuando no sean “tarifados”. “No estoy de acuerdo con aquellos artistas cuyas posiciones

políticas tienen un precio. Detesto a un artista asalariado, cuya posición política no tiene nada que ver con sus convicciones éticas sino con la plata. Ellos son despreciables”, asegura.

Atracción por las luces. La relación de María Gabriela con el mundo de la farándula no es reciente. Una delas personas que la acercó a este ambiente fue su amiga y actriz Natasha Moll, cuando formaba parte del elenco de la telenovela Te tengo en salsa, transmitida por RCTV entre 2006 y 2007, año en el que el Gobierno no renovó la concesión al canal. “Ellas eran buenas amigas y compartían con Roberto Moll y Carmen Padrón, padres de Natasha”, recuerda Luis Olavarrieta, animador de Televen, que fue amigo de la hija de Chávez cuando tenía 18 años de edad. Él la conoció gracias a Joselyn Topalian, hija de Janet Madriz, una del as abogadas del Presidente en 1999 y que actualmente es magistrada del Tribunal Supremo de Justicia.

En la boda de Moll, en 2007, Olavarrieta dice que compartió la mesa conlos Chávez: “María Gabriela es la más alegre de la familia, tiene temperamento artístico. Es la que más se parece a su papá”. Este temperamento que le reconocen a la joven la ha acercado al mundo del espectáculo y el deporte: elpiloto de Fórmula 1 Pastor Maldonado y su esposa, Gabriela Tarkany; Will Viloria, Mister Handsome 2007, el Potro Álvarez; así como los artistas Winston Vallenilla y Roberto Messuti son parte de su círculo de amistades. A este grupo se sumó ahora el actor Manuel “Coko” Sosa, con el que se le vincula sentimentalmente.

“Con tooodo nuestro amor para ustedes!” fue el comentario de la foto en la que María Gabriela Chávez y el Coko Sosa aparecen abrazados. Él fue novio delas actrices Mirela Mendoza, Shannon de Lima y Flavia Gleske. El actor escribió el 28 de abril en su cuenta de Twitter: “Jamás jugaría con la honra de una dama!!!”. Tres días antes le había enviado un mensaje en tono poético a María Gabriela: “@Maby80 caminante no hay camino, se hace camino al andar!!!”.

Con Vizcaíno, de Los Cadillac’s, también fue relacionada la hija de Chávez.“Tuvimos un nexo muy especial. La campaña nos llevó a mucho acercamiento en lo personal”, se limita a acotar el músico.

Rumbear en casa. Hace unas semanas María Gabriela fue abucheada por dos mujeres mientras comía en el restaurante Coco Thai, en el centro comercial El Tolón. A pesar de eso, la joven escribió en su timeline:“Yo la pasé genial”. Algunos trabajadores del establecimiento dicen que no es la primera vez que ella visita el lugar y que cuando lo hace sólo pide “para picar”.

La hija del mandatario, que no ejerce su profesión y se desconoce si continúa viviendo en la residencia presidencial La Casona, prefiere refugiarse en casa de amigos. En la de Vizcaíno, por ejemplo, hacen parrilladas. “Somos jóvenes, necesitamos un escape. A veces hacemos parrillas, otras veces nos cocina el chef Freddy Palacios”, cuenta el músico. Palacios indica en su biografía de Twitter que es asistente personal de Los Cadillac’s y chef profesional. El jueves pasado mantuvo una conversación con la hija de Chávez a través de esta red.

“Se están aprovechando de la soledad y fama de María Gabriela. Te aseguro que mucha gente del mundo artístico quiere entrar a ese círculo y se fotografían en yates, fiestas, entre grandes lujos. Ellos no tienen ese dinero, pero quieren que ella los vea. Son una cuerda de oportunistas y María Gabriela se está rodeando de ellos”, lamenta Olavarrieta.

 

Fuente: El Nacional

 

 

 

 

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