La coordinadora regional de Primero Justicia en el estado Portuguesa, María Beatriz Martínez, denunció que las protestas que se han generado en la entidad específicamente en Biscucuy y Papelón se debe al reclamó por la desaparición de aproximadamente cuatro mil setecientos cilindros de gas recolectados por las autoridades municipales, junto a los representantes de PDVSA Gas comunal y las autoridades regionales de la llamada empresa PORTUGAS.
Martínez detalló que en el municipio Sucre “reponer entre 1800 y 1900 bombonas reportadas, equivale a 144 mil dólares, en un promedio de 80 dólares cada una, a sabiendas que pueden costar hasta 100 dólares, por la gran escasez de esos cilindros, mientras que en el municipio Papelón se necesitan 184 mil dólares aproximadamente al mismo promedio de precio, para poder recuperar los 2800 cilindros de gas ”hurtados”. Es insólito que ni los alcaldes que estuvieron involucrados en esa situación, en el caso de Papelon el hoy legislador Alirio Bonilla y en Sucre Argenis García, mucho menos el gobernador anterior ni Primitivo Cedeño han ofrecido solución a la problemática causada ¿Cómo hace una población empobrecida y en total abandono para hacerle frente a ese despojo de sus bienes?”.
Informó que dentro de sus recorridos por el estado ha tenido entrevistas para acompañar a los afectados y así lograr contabilizar los daños causados que se repiten y han sido causados por instituciones que funcionan de la mano del gobierno regional, “estamos promoviendo que se haga el inventario en Santa Rosalía y en Araure, de donde también hemos recibido denuncias”.
Al mismo tiempo, “instamos a Primitivo Cedeño, que utilice las ganancias que está obteniendo a través de PORTUGAS, sobre la que él mismo afirmó que le está dando “ingresos suficientes como para comprar una ambulancia mensual en Portuguesa” al respecto, si bien estamos de acuerdo con ese gasto público, aspiramos que deje de hacer gastos superfluos y bailantas vallenateras, utilice esos recursos para reponer el parque de ambulancias que está destruido y la mayoría de municipios carecen de ellas; pero consideramos que las ganancias del gas deben ser utilizadas en primer lugar para darle respuesta a los usuarios afectados por la desaparición de sus bombonas en manos de la “administración pública”.
María Beatriz Martínez exigió al actual gobernador de Portuguesa a responder por los daños causados en los ciudadanos, ya que en temporada de lluvia están haciendo maniobras para poder cocinar a leña, porque el presupuesto no les da para adquirir una bombona luego de la pérdida ocasionada por la empresa de gas.