La permanencia o salida del mercado nacional de marcas como Robin Hood, Lassie, Juana y La Comadre se puso sobre el tapete.
La permanencia o salida del mercado nacional de marcas como Robin Hood, Lassie, Juana y La Comadre se puso sobre el tapete, tras la desincorporación de la operación en Venezuela del informe de resultados trimestrales de Gruma.
La multinacional mexicana, líder mundial en la producción de harina de maíz, informó que el decreto de expropiación sobre sus subsidiarias en Venezuela (Monaca y Demaseca) y la providencia administrativa que se publicó en Gaceta Oficial de este 22 de enero motivaron su reclasificación como
«operaciones discontinuadas», según las Normas Internacionales de Información Financiera.
Por experiencias previas con la adquisición forzosa de Café Madrid y Fama de América, lo más probable es que marcas como Lassie, Juana y La Comadre formen parte de la expropiación y continúen en el país, según una fuente de la industria.
Estos nombres comerciales pertenecían a Molinos Nacionales (Monaca), que fue fundada en 1958 por la corporación estadounidense International Multifoods Corporation.
La historia de la harina de trigo Robin Hood es distinta. Si bien Gruma compró Monaca a International Multifoods Corporation en 1999, esta marca no le pertenece ni a Monaca ni a Gruma.
«Al momento de la adquisición, la firma norteamericana le dio una licencia de por vida a Gruma para usar el nombre de Robin Hood exclusivamente en el mercado venezolano».
Como la marca no le pertenece a Gruma, aún es pronto para asegurar que Robin Hood puede permanecer en manos del Estado.
Ricardo Alberto Antequera, director del departamento de Marcas de Antequera, Parilli & Rodríguez, recordó que el Gobierno ha tenido una política mixta en cuanto al uso de marcas de empresas expropiadas. «En principio, la única forma en que puede seguir con las marcas es 1) que el decreto de expropiación diga expresamente que incluye los bienes intangibles, o 2) la compañía propietaria de la marca convenga en darle una licencia de uso sobre sus marcas en Venezuela, lo cual es atípico».
Fuente: El Mundo
