«Al pueblo de Bolívar no lo sanciona nadie», así lo indicó el presidente de la República, Nicolás Maduro, durante su discurso en la marcha por los 15 años de la Constitución de 1999, y en rechazo a las sanciones de Estados Unidos a funcionarios venezolanos por violación a los derechos humanos.
El mandatario propuso la creación de un Comité de Juristas de Venezuela y otras naciones que se encargue de estudiar y llevar a juicio las violaciones a los Derechos Humanos perpetradas por países «imperialistas».
«Me atrevo a proponer que la Asamblea Nacional, en el debate que van a tener el martes sobre las sanciones, tome la decisión de conformar un Comité de Juristas por los Derechos Humanos y la justicia, para llevar a juicio por crímenes de guerra a todos estos imperialistas que han bombardeado Libia, Irak, Siria y han destruido los pueblos hermanos», afirmó en cadena nacional.
El Comité de Juristas es la respuesta de Maduro a la ley de sanciones aprobada por el Senado de EEUU y que, según reportó la Casa Blanca la semana pasada, contará con la firma del presidente estadounidense, Barack Obama, en una fecha aún sin divulgar.
«Pensándolo bien es una falta de respeto del Senado gringo no habernos metido a todos nosotros en la ley de sanciones… Yo creo que hay que recoger firmas y mandarles con la foto de la visa norteamericana para que ellos agarren su visa y se la metan por donde tienen que metérsela. Insolentes imperialistas yankees, por donde tienen que meterse las sanciones», afirmó el mandatario.
El Comité no sólo se enfocará en los dirigentes estadounidenses. «Hay que llevar a juicio internacional a sus súbditos, a sus esclavos pitiyankees en el mundo». Destacó el caso del ex presidente español José María Aznar a que quien acusó de crímenes contra la humanidad por su participación en la guerra en Irak.
«El ex presidente Aznar es un asesino porque mintió, apoyó la mentira de George W. Bush, mintió y fue el impulsor principal de la invasión y el bombardeo del año 2003 contra el pueblo de Irak», agregó.
Economía vs. política
Por otra parte, Maduro anunció que, a partir de enero, planea delegar su agenda política a representantes de su Gabinete para así poder dedicarse a resolver los problemas económicos que afectan al país.
«Todas las actividades van a seguir con su ritmo pero yo me libero de esas responsabilidades y me dedico a ganar la guerra económica», afirmó el mandatario durante su discurso. «Me verán ustedes recorriendo las fábricas, los campos y la frontera para derrotar a la mafia criminal», señaló.
Maduro afirmó que el 2015 va a ser el año del «redespegue productivo y de la diversificación». Destacó que sus prioridades durante este período serán el cuidando del empleo, el cuidado de los ingresos y el fortalecimiento de las misiones.
Sobre este último punto, reiteró que la caída de los precios del petróleo no afectará la inversión en obras sociales. «A pesar de la baja en los precios petroleros tengo los recursos para garantizar la alimentación, la vivienda y la educación de los venezolanos», afirmó.
15 años de la Constitución
El Presidente dedicó gran parte de su discurso a rememorar los hechos que llevaron a la Asamblea Constituyente de 1999. Recordó que en aquella oportunidad el oficialismo obtuvo 131 constituyentes de los 135 asientos disponibles, y reiteró su deseo de que estos porcentajes se repitan en las Parlamentarias de 2015.
Aprovechó para enfatizar sus críticas contra la oposición, grupo que a su juicio está controlado por la oligarquía y quiere tener acceso al poder de forma violenta. «Ahora tienen listo a un pelucón de verdad verdad, con grandes sumas de dinero. Ellos dicen que por las buenas o por las malas en cualquier momento amanece de presidente el pelucón», dijo.
El Presidente agregó que «no hay que perder el tiempo con ellos» y que «vamos a tener una navidad feliz». También exaltó el trabajo de su predecesor, el difunto presidente Hugo Chávez, y garantizó que continuará con las tareas que este empezó.
«El pueblo tiene 16 años al frente del Gobierno, 14 años con Chávez y 22 meses con el hijo de Chávez porque yo soy Chávez. Al ser leal a Chávez, yo soy Chávez. Al ser leal al pueblo, yo soy Chávez», afirmó.
El mandatario concluyó el acto empuñando la Espada de Bolívar para «renovar el compromiso» con el ex presidente.
Fuente: EU
