El primer mandatario nacional, Nicolás Maduro, participó este miércoles en la movilización denominada «Vida, Familia y Fe» que se realizó en las calles de Caracas a propósito del Día Internacional de la Familia.
«Yo soy un presidente que no verán débil frente a las maldades y la perversidad, un presidente valiente, cristiano, decidido y con una familia sólida decidido a refundar la familia venezolana», expresó.
Con la presencia de varios pastores de las iglesias evangélicas, el jefe de Estado reconoció que ha sentido «la puñalada de la traición en mi espalda, pero he salido ileso, he salido adelante, he aprendido».
«Ante las peores dificultades del imperio del mal, sanciones, bloqueos, siempre he dicho Dios proveerá y Venezuela va a un reverdecer, cada vez más grande (…) vamos a unirnos los buenos para ganarle a la maldad».
En su discurso en el sector El Calvario, hizo un llamado a los asistentes: «no nos dejemos disfrazar por diablos disfrazados, diablas disfrazadas».
Unión Radio