El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, celebró este jueves el «éxito» de la operación militar que comenzó el 1 de julio en el parque nacional Yapacana, en la región amazónica del país, y se saldó con la expulsión de unas 14.000 personas señaladas como «mineros ilegales».
En un acto con la cúpula de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), el mandatario explicó que la operación sirvió para desmantelar 27 ciudadelas construidas en este territorio del estado Amazonas (fronterizo con Brasil y Colombia) y para capturar a 51 miembros de bandas criminales que operaban en la zona.
«Ahora hay que ir a un proceso de reforestación y recuperación de los equilibrios», prosiguió, al recordar que el Gobierno prevé sanear el Yapacana con la siembra de nuevos árboles y otras acciones que buscan contrarrestar la degradación de los suelos y aguas causada por la explotación minera, especialmente por el uso de mercurio.
Por su parte, el comandante estratégico operacional de la FANB, Domingo Hernández Lárez, señaló que, en lo que va de año, los militares han realizado 112 despliegues en operaciones tácticas «a lo largo de toda la república».
Las autoridades determinarán las responsabilidades penales de las personas que practicaban la minería ilegal en Yapacana, donde este mes se registró un enfrentamiento armado entre militares y civiles que dejó dos muertos y seis heridos, entre ellos tres agentes.
Organizaciones de derechos humanos y formaciones políticas han pedido que se investigue la responsabilidad de los militares en este enfrentamiento.
UR