Tras varios años asegurando que el joven murió debido un disparo de una pistola de perno, el gobierno de Maduro reconoció que la muerte fue causada por el impacto de una bomba lacrimógena
Este 26 de abril se cumplen cinco años del asesinato de Juan Pablo Pernalete, quien recibió el impacto de una bomba lacrimógena en el pecho, en medio de una de las protestas antigubernamentales del año 2017, según confirmó la fiscal general de la República de ese momento, Luisa Ortega Díaz.
Durante las manifestaciones de ese año se generaron hechos de represión que actualmente investiga la Corte Penal Internacional (CPI) ante la comisión de crímenes de lesa humanidad. Este martes, la madre de Juan Pablo Pernalete recordó la muerte de su hijo. “Mi hijo ya estuviese graduado. Quizás estuviese jugando básquet profesional porque era un campeón”. Así lo expresó Elvira Pernalete.
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La madre destacó que a sus cortos 20 años de edad, su hijo «ya era un luchador social y un activista por los derechos humanos». Afirmó que ella y su esposo, José Gregorio Pernalete, se sentían atemorizados de que su hijo saliera a protestar. Sin embargo, el joven les expresaba su convicción de manifestar ante la crisis del país.
“Él protestaba contra un sistema de salud que no garantizaba asistencia médica para los niños con cáncer”, dijo.
Las declaraciones de Elvira Pernalete se dieron durante un homenaje que se le rindió a Juan Pablo Pernalete este martes en los espacios de la Universidad Metropolitana.
La versión de la pistola de perno
Tras el asesinato de Pernalete, el gobierno de Nicolás Maduro insistió en asegurar que la muerte había sido ocasionada por el disparo de una pistola de perno cautiva. Sin embargo, el 24 de mayo de 2017 la entonces fiscal general, Luisa Ortega Díaz, declaró en una rueda de prensa que Pernalete murió producto de una bomba lacrimógena disparada por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
En 2021, ante la investigación preliminar de la CPI, el actual fiscal general, Tarek William Saab, también reconoció que el joven fue asesinado con una bomba lacrimógena disparada por un GNB.
