El 27 de septiembre será el cuarto eclipse y último de una tétrada. Apocalípticos lo ligan con una profecía bíblica. La NASA explica qué es.
La llamada “Luna de sangre” será visible en la mayor parte del mundo el 27 de septiembre, y el fenómeno completará una tétrada de eclipses lunares.
Al eclipse total del 15 de abril de 2014 le siguió otro el 8 de octubre de 2014, uno más el 4 de abril de 2015 y el último será este. La NASA explica que esta serie se llama «tétrada».
Según los creyentes en las profecías, esta última serie es una predicción de Joel 3, 4: «El sol se cambiará en tinieblas y la luna en sangre, antes de la venida del Día de Yahveh, grande y terrible».
“Proféticamente hablando, el 2014 y el 2015 son muy significativos, dado que en esos dos años hay tétrada de lunas rojas que coinciden con fiestas judías, es decir, cuatro eclipses lunares seguidos (que hacen ver la luna como cubierta de sangre) y que coinciden con celebraciones que tienen que ver con algún acontecimiento de la salvación en que está relacionado Israel”, asegura Alberto Villasana, teólogo, escritor y filósofo seguido por miles de personas en Twitter.
“Lunas rojas tétradas coincidieron con la expulsión de los judíos de España, y en 1948, cuando éstos volvieron a la Tierra prometida y se refundó el Estado de Israel en Palestina, y también en la guerra de los seis días”, asegura.
La NASA, en cambio, da una explicación más simple y menos sombría.
“Un rápido viaje a la Luna nos da la respuesta: imagínate de pie en una polvorienta llanura lunar, mirando al Cielo. Sobre tu cabeza cuelga la Tierra, con la noche hacia abajo, ocultando por completo al Sol que tiene detrás. El eclipse está en marcha”.
“Es de esperar que la Tierra se vea completamente oscura, pero no es así. ¡El borde del planeta está en llamas! A medida que tu ojo recorre la circunferencia de la Tierra, estás viendo cada amanecer y cada atardecer en el mundo, a todos ellos juntos. Estos increíbles destellos de luz que apuntan al centro de la sombra de la Tierra la llenan con un brillo cobrizo y transforman a la Luna en una gran esfera roja”.
El nombre “Luna de Sangre” no es un término astronómico oficial: proviene de los cazadores que perseguían y mataban a su presa bajo la luz de la luna de otoño, almacenando alimentos para el invierno que se avecinaba.
“Imagínalos: figuras silenciosas recorriendo suavemente el bosque, la Luna encima de ellos, pálida como un cadáver, su fría luz traicionando a las criaturas del bosque”, dice la NASA.
Lo cierto es que el eclipse podrá verse desde todo el planeta y la luna dará otro espectáculo único.