Dormir mal, no descansar durante la noche, tener un sueño fragmentado… son males que sufre casi todo el mundo.
Ahora nos hemos enterado de los peligros que puede conllevar esta serie de problemas.
Uno de los causantes de estos trastornos del sueño es el estar 24 horas al día acompañados de dispositivos electrónicos. El celular, la tablet o el libro electrónico no son buenos compañeros de cama.
Según los datos que maneja la Fundación Nacional del Sueño de los EEUU, el 95% de los norteamericanos utilizan un dispositivo electrónico minutos antes de dormir. El 89% de los adultos y el 75% de los niños conviven con la tablet, el smartphone o algún otro dispositivo electrónico en la habitación en la que duerme.
Según informa el portal de noticias CNN, esta costumbre de dormir pegados a un dispositivo nos impide concebir un sueño de calidad. Todos estos aparatos se mantienen encendidos o parcialmente encendidos durante la noche, emitiendo luces o sonidos que hacen que la calidad de nuestro sueño se vea claramente afectada.
Nuestro organismo malinterpreta estas señales y puede sufrir por ello desajustes importantes. La luz que emite una televisión o un smartphone por la noche puede engañar a nuestro cuerpo y hacerle pensar que ha llegado el día y la hora de despertarnos, impidiendo que el descanso sea completo.
Otro problema que provoca la presencia de un dispositivo electrónico en nuestra mesilla de noche es la radiación. Ya son varios los estudios que han demostrado que la radiación emitida por estos aparatos provocan problemas a la hora de dormirnos.
Por último, hay un tercer problema que nos provoca la presencia de este tipo de aparatos en nuestro dormitorio. Por norma general, el dormir con el celular a nuestro lado nos hace concebir el sueño más tarde, haciéndonos perder una parte importante de nuestro descanso.
Fuente: bancaynegocios
