Hasta ahora, los menores de 7 años podían acceder libremente al estadio si iban acompañados por un adulto. Pero la junta ha decidido cambiar este hábito para evitar problemas de «sobreaforo», que pueden poner en riesgo «la integridad física» de los espectadores, según palabras de Freixa.
De ahora en adelante, todo aquel menor que quiera entrar al Camp Nou deberá hacerlo con un abono o bien con una entrada. Freixa no aclaró si las localidades serán de pago, pues la medida «está en fase de estudio».
El portavoz de la junta adujo que esta decisión se toma para cumplir con las normativas de seguridad, y se adoptará a partir del Barça-Madrid del próximo 26 de octubre.
Freixa puso como ejemplo de exceso de aforo por amplia asistencia infantil el Barça-Getafe de la temporada pasada, que se disputó a mediodía y al cual acudieron «más de 10.000 niños» sin entrada.
En el próximo Barça-Madrid se dará, según Freixa, un nuevo riesgo de sobreaforo. «Más adelante buscaremos la fórmula para que los niños puedan entrar, pero siempre será con abono o con una localidad. Estudiaremos, junto a la conselleria de Interior, de qué manera los padres podrán entrar con sus hijos al estadio», manifestó.
«La norma es de 2007, y la Generalitat nunca nos ha dicho nada al respecto. Es una decisión del departamento se seguridad del club. Hubo una charla con la Generalitat para buscar fórmulas para cumplir la ley», abundó.
«Sabemos que es una medida impopular, porque todos nosotros lo hemos hecho. Yo de niño ya iba al campo sin entrada, y mis hijos también. Pero eso no implica cerrar los ojos ante lo que pueda pasar», justificó.
Fuente: Sport.es