Los cubanos pueden comprar desde este viernes con mayores facilidades nuevos coches, después de que el Gobierno de Raúl Castro haya aprobado una serie de medidas que liberan el mercado eliminando las restricciones y autorizaciones administrativas que eran necesarias hasta ahora.
Este martes, el Gobierno publicó una Gaceta Oficial Extraordinaria en la que se incluían un decreto-ley del Consejo de Estado, otro decreto del Consejo de Ministros, y tres resoluciones de los ministerios de Economía y Planificación, de Finanzas y Precios, y de Transporte en los que se recogen las nuevas medidas, que entran en vigor este viernes.
El decreto gubernamental contempla la eliminación de «restricciones y autorizaciones administrativas» y posibilita la adquisición de vehículos de motor y sus partes fundamentales en entidades comercializadoras, a precios minoristas semejantes a los que reconoce el mercado entre personas naturales.
En la práctica, la medida supone la eliminación de la carta de autorización necesaria hasta la fecha y la liberalización de la venta estatal de motos, coches, camionetas y microbuses, nuevos y de segunda mano. Según los medios oficiales, se dará prioridad a aquellos que ya tengan una carta de autorización y aún no hayan adquirido un vehículo.
El parque automovilístico privado de la isla se calcula en unos 300.000 vehículos, entre los que abundan los estadounidenses fabricados antes de 1959 y conocidos popularmente como «almendrones», y los procedentes del antiguo bloque socialista.
Hasta ahora, los cubanos realizaban las transacciones de coches soviéticos o de fabricación más moderna ilegalmente y mediante «pactos de confianza» en los que el comprador pagaba por el automóvil sin que su nombre pudiera aparecer en la propiedad.
Fuente ABC