La clave está en hacer una pequeña pausa de cinco minutos cada hora sin afectar tu salud ni tu productividad en la oficina
Según, Ulf Euklend, profesor de la Universidad de Cambridge, si en tu trabajo te la pasas alrededor de ocho horas diarias sentada frente al computador y al terminar te sientes muy fatigada, debes saber que esta práctica podría aumentar el riesgo de muerte. Sin embargo, si al menos durante una hora haces alguna actividad física, no estás tan expuesta a esta posibilidad, ya que la inactividad se ve compensada por el ejercicio.
Ya la Organización Mundial de la Salud (OMS) había dado a conocer que las personas adultas necesitaban ejercitarse al menos 150 minutos a la semana. Pero a la luz de esta nueva investigación, realizada con base en 18 estudios con muestras a más de un millón de personas, resulta que esa cantidad de ejercicio no es suficiente para los estándares de vida actuales.
Euklend afirma que “no es necesario hacer deporte ni ir al gimnasio. Está bien caminar un poco a paso ligero, por la mañana o durante el almuerzo”, a pesar de que el ritmo de los empleos de oficina actuales no permita darse un buen tiempo para descansar. Lo ideal es aprovechar al máximo los pequeños momentos en los que nos podemos separar del escritorio, y así no permanecer tanto tiempo seguido sentada frente al computador.
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