Michelle Bachelet (Chile), José «Pepe» Mujica (Uruguay), Cristina Fernández (Argentina) y Dilma Rousseff (Brasil) sufrieron en carne propia los estragos de las dictaduras en los países que hoy en día regentan. Su silencio o declaraciones poco adecuadas a la realidad que se vive en Venezuela llevaron al artista gráfico Calavera a emprender una campaña que los desenmascara.
Por su parte, la chilena Michelle Bachelet aseguró que «jamás apoyará a ningún movimiento que de manera violenta quiera derrocar a un gobierno elegido libre y constitucionalmente». Además, señaló que «siempre hay ciertos principios que hay que valorar, que son el respeto a los derechos humanos, a la democracia y a la Constitución».
Cristina Kirchner, presidenta argentina, no dudó en denunciar que Venezuela se gestaba un «golpe suave». “La situación de Venezuela no es la misma que la de Ucrania”, se limitó a decir la brasileña Rousseff, quien abogó por el diálogo en el país a toda costa.
Estas declaraciones resultan discordantes con personas que fueron víctimas directas o indirectas de la violación sistemática de derechos humanos durante períodos dictatoriales en sus respectivos países. Así lo expresa el caricaturista Calavera a través de una serie de afiches.
Fotos: Calavera
EDC