El mundo de la literatura erótica arrasa cada día más. Por fin se han abierto las puertas de la aceptación en cuanto a hablar de sexo…Con menos tapujos de los de hace una década. Y decimos “con menos tapujos” en lugar de sin ellos porque, por desgracia, los sigue habiendo.
La literatura erótica entretiene, divierte, excita, te ayuda a fantasear y hasta mejora tu vida personal y sexual. ¿Y porqué decimos esto? Porque vivimos en una sociedad en la que apenas sabemos nada de sexo. En la mayoría de los hogares no se trata con naturalidad, esto se sabe simplemente con la siguiente escena:
Estás en casa en familia, padres con hijos e hijos con padres, y aparece una escena un tanto tórrida en la película que estas viendo. ¿Y qué ocurre en muchas ocasiones? Que todos se sienten incómodos, giran la cabeza a otro lado, se crea un aura de tensión y hasta alguien puede decir… “Vamos a ver que ponen en otro canal…”
Tampoco se nos enseña nada en la escuela sobre ello. Apenas te dan una clase o dos cuanto estás en la pubertad donde lo único que recuerdas es las bromas que se hacían después con los preservativos que te dejaban… Si es que no estabas en un colegio demasiado puritano. Que en ese caso, nanay de la China.
Pero, ¿sabes lo más curioso? Que el sexo es una actividad que la mayoría de la gente hace durante 40, 50 o 60 años de su vida o más. Después de dormir y comer, es una de las actividades que más se hacen durante nuestra vida y que, además, es la actividad que más placer nos proporciona… ¡Si sabemos sobre ella!
¿Cuánta gente no tiene complejos en el sexo? Si no es por una mala experiencia que no se ha superado, es porque no entendemos el porqué del mal funcionamiento de ‘eso’. Si no es porque no controlamos bien nuestros impulsos, lo que hace que nos precipitemos, que nos exijamos demasiado, que nos hagamos expectativas demasiado altas…
¿Quién sabe realmente hacer el amor? ¿Quién no tiene miedo a investigar con el sexo tántrico? ¿Quién no tiene temor a los intercambios de pareja? ¿Al bondage? El tema del sexo no es un campo dentro de nuestra vida, es un gran universo que nos rodea y del que queremos saber más, y gracias a internet y a la literatura erótica, ahora podemos.
La literatura erótica ha ayudado mucho a esta sociedad. Principalmente porque, aunque sea cierto que las historias son inventadas, los sentimientos de los protagonistas pueden llegar a ser tan reales como la vida misma y mucha gente, a través de los libros, descubre que no es la única persona o el “bicho raro” que piensa en hacer tal cosa, en probar esto otro, o incluso en tener ciertas inseguridad o ciertos miedos.
Por supuesto no hay que pensar que una novela erótica es una guía para ser un mejor amante, pero sí que te puede mostrar cómo afrontar una situación que tu no sabía cómo afrontarla.
Nosotras
