Este nuevo índice de precios al consumidor sólo es superado por la inflación interanual registrada en noviembre de 2003, que fue de 11,2%, según informó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
El alza en el valor de los productos entre noviembre de 2014 e idéntico mes de 2015 fue de 10,48 por ciento. Mientras que la inflación acumulada en lo que va de este año, de enero a noviembre, fue de 9,62%, la mayor para el período desde 2002, cuando alcanzó el 10,22 por ciento.
A su vez, en el mes de noviembre el índice fue de 1,01%, también el mayor desde el mismo mes de 2002.
El principal impacto en la inflación fue el efecto retardado del alza de los precios de los combustibles decretada el 30 de setiembre por Petrobras y autorizada por el Gobierno, que acostumbra a subsidiarlos para controlar la inflación. El valor del litro de gasolina al consumidor subió 8,42% entre octubre y noviembre.
Otros de los ítems que pesaron en la subida de la inflación fueron los gastos en alimentos y bebidas, con un incremento de 1,83 por ciento.
«La tasa de este año acarrea varios reajustes de ítems importantes en el presupuesto, de cuentas que pesan mucho en el bolsillo de las familias como energía, agua y saneamiento, cuyos precios estuvieron muchos años por debajo de la inflación», dijo Eulina Nunes, coordinadora del índice de precios del IBGE, citada por el sitio G1de Globo.
El mercado aguarda que el 2015 cierre con una inflación de 10,44% y que la economía se contraiga 3,5%, de acuerdo al último informe Focus del Banco Central, que consulta semanalmente a un centenar de operadores.
Brasil atraviesa una severa recesión económica desde el segundo trimestre, que según todo pronóstico se arrastrará durante todo el 2016. Y si esto se confirma, será la más larga contracción de la economía de Brasil desde 1930-31.
Infobae