La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos alertó este lunes de que una subida «aguda» de las tasas de interés para controlar la inflación podría ocasionar una mayor volatilidad en los mercados financieros globales y tensiones de liquidez.
En su informe sobre la estabilidad financiera, el regulador indicó que dichas «presiones sobre la liquidez» pueden ocasionar una salida de depósitos de los bancos, así como la desaparición de otras formas de financiación a corto plazo.
Una encuesta efectuada entre febrero y principios de abril por personal del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, recogida en este informe, indica que uno de los mayores riesgos para la estabilidad financiera es la inflación elevada, lo que podría suponer una continuación de las políticas monetarias restrictivas.
Para elaborar este sondeo, el personal contactó con 25 profesionales, desde trabajadores de fondos de inversión hasta empleados de organizaciones de investigación y consultorías, y expertos universitarios universidades, entre otros.
Tras el colapso del banco estadounidense Silicon Valley Bank (SVB) el 10 de marzo, la mayoría de los encuestados no descartaron que más bancos sufrieran apuros, dado que la economía sigue mostrando robustez pese al rápido aumento de las tasas, lo que podría provocar nuevas subidas de las tasas de interés en el futuro.
En ese sentido, muchos participantes en el estudio citaron el sector de la vivienda como un posible instigador de un «riesgo sistémico» para la estabilidad financiera precisamente por las altas tasas de interés. En concreto, algunas personas contactadas opinaron que una exposición de los bancos a activos de propiedades comerciales de bajo rendimiento podría derivar en inestabilidad.
También citaron una serie de riesgos geopolíticos como las tensiones entre EEUU y China, lo que podría deteriorar el comercio y los flujos financieros, teniendo repercusiones negativas en las cadenas de suministros y el ambiente inversor.
Otros peligros serían un conflicto potencial entre China y Taiwán, con una hipotética intervención estadounidense, y una escalada en la guerra en Ucrania, que pudiera llevar a un aumento del precio de las materias primas.
La Fed decidió la semana pasada subir nuevamente las tasas de interés, esta vez un cuarto de punto, y no estudia por el momento realizar una pausa en las subidas, pese a las turbulencias bancarias de las semanas anteriores en el país.
En su reporte, el banco central estadounidense explica que «la retirada sustancial de depósitos no asegurados» contribuyó a fallas en las entidades bancarias SVB, Signature Bank y First Republic Bank, lo que condujo a mayores tensiones de financiación para otros bancos, sobre todo, los que dependen especialmente de depósitos no asegurados y están más expuestos a riesgos por los altos tasas de interés.
La Fed indicó que su intervención y la de otras agencias gubernamentales han ayudado a «mitigar» estas tensiones y a limitar otras en el futuro.
«Los bancos domésticos tienen una amplia liquidez y una dependencia limitada en la financiación a gran escala de corto plazo», dice el regulador, quien agrega que siguen las «vulnerabilidades estructurales» en los mercados de financiación a corto plazo.
EFE