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La Virgen Nuestra Señora de Chiquinquirá después de dos años se reencontró nuevamente con su pueblo en la plazoleta de San Juan de Dios / Foto: La Verdad
Como reza la gaita: “En una lluvias de flores se pasea una princesa y San Juan de Dios le reza cánticos de poesía”, así fue el rencuentro de la Virgen Nuestra Señora de Chiquinquirá con su pueblo este sábado 30 de octubre.
Tras pasar todo el día nublado y bendecido con lluvias, los habitantes del Zulia se reunieron en la Plazoleta de San Juan de Dios, para espera ver nuevamente a la excelsa patrona.
Aproximadamente a las 5.45 de la tarde inició el santo rosario a cargo de las hijas de María.
Inmediatamente comenzó la santa misa en honor a La Bajada de la Virgen Morena, presidida por Monseñor José Luis Azuaje y el párroco de la Basilica Nedward Andrade.
Andrade expresó la alegría que sentía toda la feligresía de volver a estar cerca de La Chinita. “Es un llamado a la esperanza, a la fortaleza, al amor que nos viene de Dios que vivamos unidos como familia. Le pedimos por nuestra salud física y espiritual”.
Así también dijo que este día se sentía el fervor de un pueblo que canta, ora y lucha con su santísima madre de Chiquinquirá.
Por su parte, Azuaje manifestó que con este tiempo de crisis global “nos pide definiciones y no entretenimientos, debemos recordar que Jesús vuelve a nuestras casas, estuvo perdido para que lo encontráramos”.
Así fue la Bajada de la Virgen 2021
A las 7.30 de la noche aproximadamente terminó la santa misa y comenzó el recorrido de La Chinita por el tobogán que baja desde el nicho hasta la plazoleta de San Juan de Dios, con un concierto de los Chiquinquireños, la excelsa patrona se reencontró con su pueblo.
Después de esperar dos años y 30 minutos, la feligresía que bajo estrictos controles de bioseguridad llenó la plazoleta y la Plaza del Monumento, vio de cerca nuevamente a la virgen morena.
Con ojos llenos de lágrimas y mucha emoción vieron como le colocaron su manto rosa lleno de las huellas de los sobrevivientes de la pandemia y las alas que las personas que partieron a causa del Covid-19.
El momento de mayor emoción fue cuando los servidores de María levantaron en sus hombros el retablo sagrado para comenzar el recorrido inicial de la virgen entre su pueblo.
Por seguridad este año La Chinita no realizó procesión. Sin embargo, salió en el maría móvil para realizar un recorrido por varias calles de la ciudad que duró aproximadamente una hora 45 minutos.
La Verdad
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