El presidente electo de Perú se disculpó por lo dicho en campaña. Aseveró que es esencial reunirse con su rival antes de empezar su gobierno
“A Pedro Pablo Kuczynski se lo ve muy seguro. Es difícil creer que quien va a manejar el Perú pueda ostentar tanta calma. Quizá sea porque, en buena cuenta, lo hizo antes como primer ministro. En todo caso, da mucha tranquilidad que al capitán del barco se lo vea tan firme, especialmente cuando, en nuestro país, las aguas no son las más mansas”, describe el diario peruano sobre la actitud que proyecta el mandatario electo. A pesar de la calma el nuevo gobernante de Perú no tuvo una actitud pasiva con Venezuela, al gobierno del presidente Nicolás Maduro lo calificó de autoritario y señaló que América Latina se debe unir en torno a los ideales democráticos, aunque todavía no tiene claro las acciones que se tomarán, pues reconoce que una de las refinerías de su país funciona por el petróleo venezolano.
—¿Cree aún que el fujimorismo abre las puertas del Estado al narcotráfico?
—Lo que creo es lo que leo en los periódicos: hay un grupo de legisladores electos que están siendo investigados por lavado de activos, algunos con relación al narcotráfico. Pero creo también en el debido proceso.
—Pero durante las últimas semanas de la campaña usted decía que “hay que cerrarle el paso al narcoestado”. ¿El fujimorismo representa al narcoestado?
—No necesariamente, pero ahí tienen algunos jugadores que están bajo sospecha.
—¿Es posible entablar un diálogo con el fujimorismo teniendo en cuenta que hubo calificativos de su parte de narcotráfico, autoritarismo o montesinismo?
—Y ellos nos acusaron de estar enfermos, de estar medio muertos, de lobbistas. Tenemos que voltear la página, pero todo proceso investigativo legal en cualquier tienda política tiene que seguir adelante dentro de los cauces institucionales.
—Usted ha mencionado que ambos partidos tienen que disculparse. ¿Pero quién se disculpa primero?
—Yo no tengo orgullo. Yo me disculpo. Pero la verdadera disculpa es al Perú porque mientras hay estas discusiones tenemos un montón de gente con inseguridad ciudadana y sin servicios básicos. La verdadera disculpa no es de uno al otro, sino al Perú.
—¿Cree necesario reunirse con la señora Fujimori antes de que usted asuma el cargo?
—Es absolutamente esencial.
—¿Y de qué debe tratar esa reunión?
—Lo lógico es, primero, una agenda legislativa básica para un nuevo gobierno. Nosotros hemos planteado una que tiene que ver con seguridad, las mypes y su acceso al crédito y con impuestos.
—¿Y ve en el fujimorismo una buena voluntad de diálogo?
—Espero que sí.
—No ha descartado que miembros de Fuerza Popular integren su primer gabinete ministerial.
—Yo espero tener un solo gabinete ministerial, (risas). Pero recién estamos revisando nombres en sectores como el agrícola o programas sociales.
—Si incorporara al fujimorismo, ¿estaríamos hablando de un cogobierno?
—Creo que estamos saltando una etapa. Primero tenemos que ponernos de acuerdo en los grandes lineamientos, y después ya se puede hablar de lo otro.
—En una entrevista con Semana económica dijo que si la bancada fujimorista promueve una ley para facilitar el arresto domiciliario de personas de avanzada edad, usted no tendría problema en firmarla. Al permitir ello que Alberto Fujimori se fuese a su casa, ¿no violaría el acuerdo que firmó con el colectivo No a Keiko?
—Esto no sería un indulto. Se respetarían todos los procesos de la década pasada. Si se diera a través del Congreso una ley de este tipo, se trataría solo de dónde se cumple la sentencia.
—¿El gobierno de Maduro tiene un corte autoritario?
—¿Que tiene un corte autoritario? (Risas). ¿El ganso es blanco? Han perdido una elección y no quieren reconocerlo.
—¿Cuál va a ser, entonces, su posición con respecto a Venezuela? ¿Tomará una posición dura como el presidente de Argentina, Mauricio Macri?
—Tiene que haber respeto a los derechos humanos. No puede ser que el gobierno esté decidiendo sobre la amnistía de Leopoldo López, cuando este no ha hecho nada.
—¿Va a liderar entonces una condena latinoamericana a Venezuela?
—Los latinoamericanos nos tenemos que unir alrededor de ideales democráticos. No podemos permitir este tipo de cosas.
—¿Y qué medidas concretas se pueden tomar?
—En América Latina siempre se dan resoluciones de la OEA y las Naciones Unidas, y no pasa nada. ¿Vamos a aplicar sanciones? Tampoco es tan fácil. La refinería de Talara, por ejemplo, depende del crudo venezolano. Hay que mirar bien qué se va a hacer. En el caso de Venezuela, el país que más conoce su situación es Colombia. Hay que trabajar con Colombia en una posición sobre eso.
EL COMERCIO
PERÚ
GDA13 DE JUNIO 2016 – 12:01 AM