El sospechoso se negó a corroborar su identidad real y, en su lugar, prorrumpió la consigna de “muerte a los traidores. Libertad para el Reino Unido”.
El juicio a Thomas Mair, de 52 años, está acusado de disparar y apuñalar fatalmente a la parlamentaria laborista, que ayer habría cumplido 42 años, el pasado 16 de junio en la localidad de Birstall, en el norte de Inglaterra -hace justo una semana.
El sospechoso, quien supuestamente sufre trastornos mentales y tenía vínculos con círculos de la extrema derecha, se enfrenta a los cargos de asesinato y posesión de armas de fuego, entre otros.
Mair compareció mediante vídeo conferencia, desde la prisión de alta seguridad de Belmarsh, ante el tribunal penal de Old Bailey, en Londres.
En esa audiencia, el magistrado fijó a modo provisional para el 14 de noviembre el inicio del juicio, que previsiblemente se desarrollará en el citado tribunal londinense, según indicó, pero ante un juez del Tribunal Superior.
Durante la sesión de hoy, Mair, cuyo caso se está juzgando en virtud del llamado “protocolo de terrorismo”, tan solo habló para confirmar su nombre.
En su primera comparecencia ante un tribunal el pasado sábado, el hombre se negó a corroborar su identidad real y, en su lugar, prorrumpió la consigna de “muerte a los traidores. Libertad para el Reino Unido”.
La vista preliminar de hoy coincide con el día del referendo europeo en el Reino Unido, cuando los británicos acuden a las urnas para decidir si quieren que este país continúe dentro de la Unión Europea (UE) o, por el contrario, que abandone el bloque común.
El pasado lunes, los diputados volvieron al Parlamento -en receso por la campaña del plebiscito- en una sesión extraordinaria para rendir tributo a la diputada asesinada, que ayer habría cumplido 42 años.
Para marcar la fecha de su cumpleaños, miles de personas se congregaron también este miércoles en la céntrica plaza de Trafalgar en Londres para rendir un emotivo tributo a la diputada, entre ellos su viudo, Brendan Cox, y sus hijos, la Premio Nobel de la Paz Malala Yousafzai y Bono, cantante de U2.
EFE