Un nuevo caso de violencia se hizo presente en el fútbol nacional, en esta ocasión el hecho no ocurrió entre barras, la disputa la protagonizaron los jugadores de Trujillanos FC y la Policía Regional de Maracaibo.
Según declaraciones de una fuente liga al equipo JBL del Zulia, el conflicto se originó en el epílogo de la primera parte tras la expulsión del capitán de Trujillanos FC, Luiryi Erazo, el central recibió la roja directa al minuto 38 por una agresión si balón. Erazo permaneció aproximadamente cinco minutos en el engramado negándose a salir del mismo, lo que generó el ingresó de las fuerzas de seguridad.
Ya en la entrada de los camerinos, Erazo reaccionó ante un supuesto empujón de uno de los funcionarios que lo conducía hasta el vestuario, lo que desencadenó una fuerte gresca entre el jugador y varios efectivos de la Policía Regional.
Jugadores y parte del cuerpo técnico del equipo visitante al percatarse de la situación abandonaron el campo (el juego aún se encontraba en desarrollo) para auxiliar a su compañero, lo que acrecentó la disputa, al punto de efectuarse denotaciones con perdigón por parte de la Policía Regional de Maracaibo.
Para trujillanos FC este ha sido un torneo para el olvido, recordemos que el pasado 19 de Septiembre fue víctima de un secuestro exprés cuando retornaba Valera luego de jugar ante Monagas, y ahora vuelve a ser noticia por este inconveniente con la Policía Regional.
Meridiano