El banco más grande de Estados Unidos, JP Morgan Chase, obtuvo un beneficio de 27.094 millones de dólares en el primer semestre de 2023, un 60% más en comparación con el mismo periodo del año anterior, tras comprar a principios de mayo a precio de saldo el First Republic Bank.
Según ha anunciado este viernes el grupo bancario con sede en Nueva York, los ingresos netos entre enero y junio ascendieron a 81.737 millones de dólares, un 29% más que en el primer semestre de 2022.
Solo en el segundo trimestre, los datos en los que más se fijan los inversores, JP Morgan Chase ganó 14.472 millones de dólares, un 67,3% más, aunque excluido el efecto positivo de la compra de First Republic Bank, el aumento sería del 40%.
Jamie Dimon, consejero delegado y presidente de JP Morgan, destacó que reportaron otro trimestre de sólidos resultados, generando un ROTCE del 23% después de excluir una ganancia neta después de impuestos de US$1.800 millones relacionada con la transacción de First Republic, «así como pérdidas discrecionales de valores de inversión después de impuestos de 700 millones de dólares».
«Incluso después de la transacción de First Republic, mantuvimos un índice de capital CET1 extraordinariamente fuerte del 13,8%», sumó.
Dijo que si bien esperaban cambios sustanciales de capital con la finalización de Basilea III y cambios probables por venir para la liquidez bancaria, «manejaremos cualquier requisito nuevo como hemos demostrado en el pasado, sin embargo, advertimos que los cambios regulatorios importantes probablemente tendrían consecuencias en el mundo real para los mercados y los usuarios finales».
Acotó que los consumidores siguen gastando, aunque a ritmo más lento y apuntó que el mercado laboral «se ha suavizado un poco, pero el crecimiento del empleo sigue siendo sólido».
EFE