El vicepresidente Jorge Arreaza aseguró que el cambio de la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) al Centro Nacional de Comercio Exterior no significará «un trauma» para quienes requieren en este momento dólares.
«Tiene que haber un régimen transitorio para la supresión de Cadivi y todos los trámites para la adquisición siguen siendo exactamente los mismos hasta que se hagan nuevos anuncios, porque el principio de la continuidad administrativa hay que respetarlo. Tiene que haber tranquilidad, esto no significa ningún tipo de traumas», dijo.
Aseveró que el dólar a 6,30 bolívares es «indiscutiblemente» sostenible. «El anclaje fundamental de nuestra moneda, sobre todo para la alimentación, los medicamentos e insumos para la industria, tenemos que protegerlo», agregó.
Señaló que fortalecerán Sicad, aunque aún no puede dar datos precisos sobre esto. «Vamos a reorganizar, estamos construyendo esa política con el ministro Rafael Ramírez y con Rodolfo Marco Torres, tenemos que ser más rigurosos y que cada dólar que recibamos y tengamos que utilizar para la importación sea sagrado», puntualizó.
Acotó que el sistema complementario de divisas con su banda y las medidas de control, sumadas a una estrategia bien diseñada y sin improvisaciones, lograrán que el dólar paralelo sea «un mal recuerdo de la burguesía venezolana».
Arreaza dijo que el Gobierno tiene casi una “resonancia magnética” para saber lo que ha pasado con los dólares, cómo se los llevan y cómo los roban. «Vamos a garantizar que los dólares se usen para lo que lo solicitan y no para que se lo lleven los raspadores de cupo», puntualizó.
Agregó que los anuncios del jefe de Estado, Nicolás Maduro, reafirman la política económica que diseñó Hugo Chávez y que los ajustes que se hacen son en pro de un modelo socialista.
Globovisión