El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, dijo el jueves que viajará a Londres la próxima semana para reunirse con partidarios de la oposición siria.
Kerry, que ha encabezado esfuerzos con Rusia para hallar una salida política a la brutal guerra civil en Siria, reiteró también su convicción de que «no hay una solución militar, definitivamente no», al conflicto.
«Solo hay un índice constante de destrucción y creación de una catástrofe humanitaria para todos en la región si los combates continúan», dijo en una entrevista con la Radio Pública Nacional.
«Estamos tratando de llevar el proceso (de salida de la crisis) adelante. Sostendré reuniones el próximo martes en Londres con el grupo de apoyo de la oposición», señaló. «Estamos trabajando con miras a la conferencia de Ginebra, aunque no sepamos cuál será el resultado», añadió Kerry.
El jefe de la diplomacia estadounidense dijo en la entrevista que las armas químicas halladas en Siria podrían ser enviadas fuera del país para ser destruidas de forma segura.
«Espero que la mayoría de ese material sea movido lo más rápidamente posible hacia un solo lugar, y preferiblemente en un barco, y sea retirado de la región», afirmó.
Kerry hizo estas declaraciones horas después de que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) anunciara que había inspeccionado cerca de la mitad de las instalaciones del arsenal que debe ser destruido de aquí a mediados de 2014. Insistió también en que el hecho de que el presidente sirio, Bashar al Asad, estuviera colaborando con la comunidad internacional a anular su arsenal químico no le ayudaría a mantenerse en el poder ni significaba que recuperaba su legitimidad.
«El hecho es que esas armas pueden ser eliminadas si Asad está o no allí porque nosotros conocemos las ubicaciones, las ubicaciones han sido declaradas y aseguradas», dijo.
Fuente: Agencias
