En su libro Odio a todo el mundo… empezando por mí (2012), la comediante Joan Rivers hizo público el concepto que tenía sobre los funerales, eventos que «amaba» según escribió entonces.
«Para mí los funerales solo son un show de alfombra roja para las personas muertas», bromeó la actriz, antes de ponerse un poco más seria y enumerar, específicamente, cómo quería que fuese su funeral.
«Cuando yo muera (y sí, Melissa -su hija-, ese día llegará; y sí, Melissa, todo está a tu nombre) quiero que mi funeral sea un gran espectáculo con luces, cámara y acción. Quiero un servicio de catering. Quiero paparazzis. ¡Quiero periodistas haciendo una escena!. Quiero que sea como Hollywood en todo sentido. No quiero a un rabino paseando por el lugar. Quiero que Meryl Streep llore en cinco diferentes acentos. No quiero un elogio. Quiero que Bobby Vinton agarre mi cabeza y cante Mr. Lonely.
Quiero lucir hermosa, mejor en la muerte de lo que luzco en vida. Quiero ser enterrada en un vestido Valentino y quiero que Harry Winston me haga una etiqueta para los pies. Y quiero un ventilador de manera que, incluso en el ataúd, mi cabello sople como el de Beyoncé».
Joan Rivers, conductora de Fashion Police por E!, falleció la tarde de este jueves tras pasar varios días en coma.
Fuente: EU