Como «una mentira». Así calificó la ministra de Servicios Penitenciarios, Iris Varela, la información publicada por El Universal en su edición del sábado, en la cual se aseguraba que los tribunales carabobeños estaban analizando una solicitud formulada por su despacho para darle libertad condicional a Wilmer José Brizuela Vera, alias «Wilmito», quien la semana pasada fue condenado a más de 14 años de cárcel por ordenar el asesinato de la entonces jueza superior de Bolívar, Mariela Casado.
«Eso ni siquiera se ha considerado», aseguró la funcionaria en conversación telefónica con este diario, en la cual indicó que su despacho tiene por política no solicitar ningún tipo de beneficio para los reos condenados por delitos graves.
«Por homicidio, secuestro, corrupción y delitos de lesa humanidad jamás tramitamos beneficios (…) No estamos aquí para amparar a personas que han arrebatado la vida de otra (…) Ahora, si en el Poder Judicial quieren darle un beneficio, allá ellos», zanjó, al tiempo que recordó que junto a la actual primera dama, Cilia Flores, fue de una de las impulsoras de la reforma que en 2005 la Asamblea Nacional realizó al Código Penal, la cual cerró las puertas para que los condenados por delitos graves pudieran disfrutar de alguna fórmula alternativa de cumplimiento de su condena.
«Nosotras impulsamos ese parágrafo único, que luego desaplicó el Tribunal Supremo (…) A nosotras se nos acusó de violar el principio de progresividad de los derechos», rememoró Varela. La funcionaria también señaló que en la reforma al Código Orgánico Procesal Penal (COPP) de 2012 fue una de las defensoras de que se elevaran los requisitos para que los sentenciados por homicidio o secuestro optaran a los beneficios de ley.
Al reseñar la información sobre el fallo contra «Wilmito», este diario dio cuenta de informaciones suministradas en predios judiciales, según las cuales funcionarios del Ministerio de Servicios Penitenciarios habrían pedido a los tribunales de Carabobo que se le diera un régimen de trabajo; es decir, que se le permitiera dejar la prisión de Tocuyito donde está en la actualidad para ir a trabajar y solo tener que dormir en ella.
El Universal