Desde la aparición del primer iPhone, Apple ha buscado la innovación en cada uno de sus modelos y ha tratado de convertirse en el modelo de referencia a seguir. Esto se ha traducido en una constante labor de mejora y modernización en sus diseños y un lanzamiento tras otro de un nuevo modelo de iPhone en periodos muy breves de tiempo. Entre este nuevo iPhone 6, que llegará a nuestro país la semana que viene, y su predecesor, el iPhone 5S, apenas ha pasado un año. Comparamos ambos modelos para saber si esta actualización supone un verdadero avance.
Sobre su diseño externo, el nuevo modelo es ligeramente más ancho que el anterior mientras que su altura apenas varía, 750×1334 píxeles frente a los 640×1136 que tenía el 5S. A esto se suma un ligero aumento del tamaño de la pantalla de 0.7 pulgadas, lo que aumenta en total su resolución un 38% respecto a su antecesor. También, para los más exigentes, Apple lanzará un modelo de 5.5 pulgadas y resolución full HD, que supone un aumento del 185% sobre el modelo del año pasado.
Decir que su diseño es esencialmente idéntico al que hemos podido ver estos meses, un cuerpo unibody de aluminio con líneas redondeadas y un grosor de 6.9 mm, aún menor que el del 5S, el cual tenía un grosor de 7.6mm.
Sobre sus mejoras internas, el iPhone 6 presenta un procesador Quad Core A8 con una capacidad un 25% mayor a la del procesador A7 que había utilizado Apple en su anterior smartphone. Este nuevo procesador se presenta como un 50% más eficiente, un 13% más pequeño y cuenta con aplicaciones específicas de fitness gracias a su co-procesador Apple M8. Sus posibilidades de conexión han sido mejoradas también, 150 Mbps frente a los 100 del iPhone 5S, y opción de acceso a más de 20 redes, permitiendo conectarse en cualquier lugar en que te encuentres.
Si sois amantes de la fotografía y esperabais una cámara con mayor definición y capacidad, este smartphone mantendrá la cámara de 8 megapíxeles del 5S y su sistema de apertura f/2.2. También conserva la capacidad de grabar vídeos incluso a cámara lenta (120 fps máximos), pero pierde el estabilizador de imágenes en contrapartida y no ha sufrido ninguna mejora sobre la velocidad de captación de imágenes.
EL iPhone 6 es una herramienta muy útil para todos aquellos que requieran de un dispositivo capaz de proporcionarles acceso rápido y eficaz a documentos, correos y que garantice sus posibilidades de comunicarse, pero no es el gran salto de gigante que cabría esperar respecto del 5S. Mantener la cámara del modelo anterior es un motivo de críticas que seguro se dejará notar, y aún habremos de esperar a las pruebas de rendimiento para comprobar sus afirmaciones sobre la mejoría del procesador interno.
Fuente: que.es