Vecinos del barrio Mario Briceño Iragorry golpearon brutalmente a Tony Antonio Cañizales Vásquez (26), para tratar de lincharlo, al enterarse de que el hombre había asesinado a cuchilladas a su hijo Antonio Cañizales Prato, de apenas 4 años de edad.
El hecho ocurrió el jueves en una residencia de la calle Moreno, en el referido barrio ubicado en Catia, parroquia Sucre, al oeste de Caracas.
Cañizales aprovechó la ausencia de la madre del pequeño para cometer el crimen. Antes de acuchillarlo en el pectoral izquierdo, le envió un mensaje de texto a su hermana para notificarle lo que iba a hacer y pedirle perdón.
La mujer llegó a la casa, pero ya el crimen había ocurrido. El pequeño yacía sin vida encima de la cama matrimonial y al lado de sus juguetes. Cañizales se hizo cortaduras en el cuello, intentando quitarse la vida, pero no lo logró.
Los vecinos, al enterarse de lo que había hecho arremetieron contra el y tuvo que ser rescatado por una comisión de la PNB, que lo llevó a un centro asistencial, donde se encuentra en estado de gravedad.
La comunidad estaba enardecida, también culpaba a la madre, a quien intentaron linchar y fue trasladada al Cicpc de ProPatria.