La Red Venezolana de Periodismo Ciudadano Reporte Ya organizó un foro con activistas que defienden el derecho a la salud y alimentación en Venezuela, para plantear ideas que permitan medir y diagnosticar la crisis con cada tuit que se genera en la red social.
El laboratorio de recolección de data propone usar la información que se divulga a través de Twitter para conocer cuáles son los problemas y carencias de la población venezolana. No solo saber dónde se están desarrollando los hechos, sino saber lidiar con la cantidad de datos.
Susana Raffalli, experta en Seguridad Alimentaria, orientó sobre los conceptos que caracterizan el problema del país, ya no como una crisis sino como una emergencia humanitaria compleja. Alega que el problema venezolano no se debe a una circunstancia, sino que es originado por el Estado y que, además, tiene una instalación lenta y no se debe a un desastre natural.
Raffalli explicó que lo que caracteriza esta emergencia humanitaria es su instalación progresiva, desgaste, miedo y una normalización de la situación que ocasiona que la memoria se vaya borrando. “Ya no se está registrando que estamos perdiendo dignidad”, dice Raffalli.
La activista recomienda no solo a los medios de comunicación difundir lo que sucede, sino que insta a la ciudadanía a registrar, desmentir y hacer uso de canales informales para denunciar lo que ocurre en el país.
Francisco Valencia, desde la coalición por la Salud y la Vida, apuesta por darle rostro a la crisis. No solo denunciar estadísticas sobre escasez de medicamentos para personas con condiciones crónicas, sino divulgar historias que expliquen la magnitud del problema y lo que implica padecer cada enfermedad en medio de una Venezuela en crisis.
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Por Confirmado Massiel Bravo