Ante la amenaza de las lluvias y sus posibles consecuencias en Caracas, el Gobierno de Venezuela puso en marcha desde el viernes un plan de “gestión de riesgo y crisis climática” que busca prevenir desastres y proteger a miles de familias que viven en zonas vulnerables de la capital.
Según informó el Ministerio de Ecosocialismo (Medioambiente), el plan consiste en la instalación de 20 “estaciones meteorológicas comunitarias” equipadas con pluviómetros, que permitirán monitorear las precipitaciones y alertar sobre posibles emergencias.
La alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez, explicó que las autoridades se están preparando para “prevenir cualquier evento catastrófico” que pueda producirse en zonas adyacentes a las “principales quebradas” de la ciudad ante la temporada de “lluvias, que ya se acercan”.
“En el sur del país ya comenzaron las lluvias hace dos meses y, desde Caracas, nos estamos preparando para evitar situaciones catastróficas. Hoy se han entregado equipamientos, el Ministerio para el Ecosocialismo y el Ministerio de Interior y Justicia han entregado implementos para esas bases meteorológicas comunales”, dijo la funcionaria, citada en un comunicado oficial.
En Caracas, nos hemos preparado para la llegada de las lluvias, con limpieza de quebradas, caños y corte de árboles, y ahora activamos el Estado Mayor de Riesgo para consolidar el equipo que continúa en alerta, protegiendo la vida en la ciudad capital #RespetoALaSoberanía pic.twitter.com/VBqHxNkSQy
— Carmen Meléndez (@gestionperfecta) May 13, 2023
El ministro de Ecosocialismo, Josué Lorca, aseguró que el plan será ejecutado por un “equipo de gestión de riesgo”, dirigido por el Ministerio de Interior y la Alcaldía de Caracas.
El plan se activa luego de que el presidente Nicolás Maduro alertara en abril del inicio de la temporada de “lluvias abundantes”, cuando se espera el paso de 65 ondas tropicales sobre el país, donde ya se han registrado inundaciones y afectaciones en carreteras en varios estados.
El año pasado, el país sufrió un fuerte período de lluvias que causaron daños de variada intensidad en unas 14.000 viviendas y dejaron un saldo de, al menos, 94 muertos.
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