logo azul

Inflación de generales y de la papa

Categorías

Opinión

Inflación de generales y de la papa

 

Al cierre del primer semestre del año, Venezuela tiene más inflación —100% la acumulada y más de 400% la anualizada— y también más generales, pues el 5 de Julio fueron ascendidos (entre generales y almirantes) 167: la cifra acumulada es una barbaridad, quizás el país lidere el per cápita de altos mandos castrenses en el planeta. Maduro dice que así se garantiza la paz.

 

 

No hay que olvidar que el discurso oficial insiste machaconamente que aquí se libra una «guerra económica» y aunque los datos indiquen que se va perdiendo mes a mes y año a año, nada impide premiar la lealtad. Maduro se preguntaba en el acto de transmisión de mando de los componentes militares: «¿Cómo ha hecho Venezuela para resistir y enfrentar tantas agresiones?». Y la respuesta que nos ofrece es que en la «unión cívico militar» está la clave de todo. Y remató: «Juntos somos capaces de todo». Los resultados están a la vista.

 

 

El economista Luis Oliveros, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Metropolitana, indicó que en Venezuela no hay asomo de crecimiento económico, lo que en cualquier nación más o menos seria constituiría una tragedia, pero no en la república bolivariana en la que un venezolano de a pie —la inmensa mayoría— solo puede costear 10,7% de los alimentos básicos contemplados en la canasta alimentaria.

 

 

De acuerdo con el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros, citado en un reporte de Bloomberg,  una familia de 5 personas necesita 500 dólares al mes para su alimentación. El salario mínimo sigue estancado en 5 dólares —5, no leyó mal—, por lo cual solo una minoría pudiente podrá comer como es debido, mientras la mayoría depende de las remesas que envíen sus familiares del exterior o resistirá —oiga bien, señor Maduro— con una dieta incompleta e insuficiente que ya está haciendo estragos en los niños y jóvenes.

 

 

Maduro no podrá argumentar en esta ocasión que las cifras del desempeño económico que se divulgan son falsas y manipuladas. El propio Banco Central de Venezuela, que llevaba medio año sin publicar datos,  reapareció a mediados de mayo para indicar que el país vivía una desaceleración de la inflación. Es decir, el precio de los productos y servicios sigue creciendo pero más lentamente. Aún así, en los cuatro primeros meses del año reconocía un alza de 86,7%. Como para hacer una fiesta.

 

 

El Observatorio Venezolano de Finanzas destaca que cada día que pasa el venezolano pierde su poder de compra, pero advierte que el problema tiene otro fondo: el de una economía que se ha reducido en 80% durante la decena de años en el poder de Nicolás Maduro. Un país en los huesos que celebra —»glorioso y victorioso», dice el inquilino de Miraflores— como en las viejas autocracias su poder militar y desatiende hasta la indolencia las penurias de la gente.

 

 

Editorial de El Nacional

Comparte esta noticia:

Contáctanos

Envíe sus comentarios, informaciones, preguntas, dudas y síguenos en nuestras redes sociales

Publicidad

Si desea obtener información acerca de
cómo publicar con nosotros puedes Escríbirnos

Nuestro Boletín de noticias

Suscríbase a nuestro boletín y le enviaremos por correo electrónico las últimas publicaciones.