Tadas Maskimovas es un artista ruso que decidió realizar un extraño experimento musical al tocar el violín con pelo humano como cuerdas del instrumento. Sí, así como se lee. El pelo está meticulosamente trabajado para crear la tensión y rugosidad adecuadas. Empiezan creando unas trenzas y luego les aplican un pegamento para hacerlas más resistentes. El experimento fue diseñado para probar que se puede hacer música con casi cualquier cosa que desee.
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