La ONG francesa Fundación Mimi eligió a 20 pacientes con cáncer para que se sometieran a una sesión de maquillaje y peluquería. La única condición era que durante todo el proceso de transformación mantuvieran los ojos cerrados. Los pacientes esperaban verse favorecidos al abrir los ojos, pero todos se llevaron una gran sorpresa, ya que la idea del proyecto es que al enfrentarse a su inesperado aspecto burlesco y extravagante las personas se olvidaran de su enfermedad “aunque solo fuera por un segundo».
Fuente RT Actualidad
