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Iglesia reclama “cambio urgente” tras congelamiento del diálogo

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Iglesia reclama “cambio urgente” tras congelamiento del diálogo

Monseñor Diego Padrón, presidente de la CEV, advierte que más de nueve millones de venezolanos viven en pobreza extrema. CEV lamenta que las reuniones entre el Gobierno y la oposición hayan sido una simple contingencia sin proyección

 

Un “cambio urgente en todos los órdenes” reclama la Iglesia en nombre del pueblo venezolano, dada la falta de resultados de las conversaciones entre el Gobierno y la oposición, en medio del agravamiento de la crisis económica, social y moral que vive el país.

 

Monseñor Diego Padrón, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) lamentó que se haya agudizado la división interna y la polarización en el país, en detrimento de las instituciones y la convivencia ciudadana.

 

“Venezuela reclama un cambio urgente en todos los órdenes. Dejando lo económico y político a los especialistas; en lo social y ético da tristeza ver el progresivo deterioro de las instituciones y de la convivencia entre los ciudadanos, se ha perdido la confianza mutua y la nota más sobresaliente es la división interna de los sectores mayoritarios y el país se ha convertido en un rompecabezas difícil de armar”.

 

Estas palabras formaron parte del discurso de bienvenida de Monseñor Diego Padrón, en el marco de la instalación de la centésima segunda asamblea ordinaria de la CEV, considerada el espacio propicio para “discernir los signos de los tiempos e iluminar el camino de la iglesia en la difícil situación económica y político social” por la que atraviesa el país.

 

Diálogo de contingencia

 

Para el presidente de la CEV, el diálogo entre el Gobierno y la oposición se congeló sin resultados, frustrando las expectativas de los venezolanos en cuanto a la posibilidad de encontrar una salida la crisis que más allá de “apaciguar la protesta” conlleve al entendimiento y la sensatez.

 

«Con el diálogo se esperaba encontrar caminos comunes para la superación de la conflictividad e ingobernabilidad, pero sucedió que el diálogo no fue mucho más que una simple contingencia sin proyección ni consecuencias».

 

Recordó además Monseñor Diego Padrón que en Venezuela hay más de nueve millones de personas que viven en pobreza extrema, quienes a su vez son los más afectados por los desaciertos en el orden social y económico.

 

Por José Gregorio Martínez

LA VERDAD

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