Margarita, cuatro quesos, calzone, napolitana, con masa fina, gruesa… ¿Existe algún plato en el mundo que guste más que una buena pizza? Seguramente no, y es que esta popular y humilde delicia que nació para alimentar a los pobres de Nápoles en el siglo XVII es, junto con la hamburguesa, la comida más internacional y reconocible del mundo.
La pizza celebra este sábado 9 de febrero su Día Mundial y para celebrarlo ¿Qué mejor que zamparte una? Puedes ir a la pizzería de tu barrio o hacerte una en casa. Si te decides por esta última opción, te contamos cuál es el secreto de una buena pizza. Lo ideal es hacer tu propia masa, más saludable que las comerciales, llenas de grasas hidrogenadas, azúcares y aditivos.
El secreto de una buena masa es, además de los ingredientes de calidad (harina, levadura, agua y sal) el tiempo de amasado. Para que salga perfecta hay que emplear al menos 10 minutos en amasar si lo hacemos a mano. Lo recomendable es utilizar una harina de fuerza y dejar reposar la bola al menos 24 horas, cubierta con un paño húmedo para que se mantenga hidratada. Si no tienes paciencia y quieres tener una masa lista en dos horas, utiliza una harina más floja.
La masa admite casi cualquier ingrediente, siempre que no se mezclen sin ton ni son, con el tomate (casero, por supuesto), como base. El queso tampoco puede faltar, pero no cualquiera. La mozzarella Fior di latte es opción preferida de los pizzaiolos. ¿Te animas?