Cada 15 de noviembre todos los años se celebra el Día Mundial Sin Alcohol. Es un día en el que gracias a diversas iniciativas se pretende concienciar a la población de las graves consecuencias que puede llegar a tener el consumo de alcohol.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió establecer un día para fomentar la responsabilidad de las personas sobre todo de los jóvenes para controlar el consumo de alcohol, siendo establecido el 15 de noviembre.
El consumo excesivo de alcohol lleva consigo y está relacionado con un gran número de trastornos y enfermedades, entre las que se encuentran: Daño cerebral, problemas de memoria, adicción y dependencia, subida de la tensión arterial, posibilidad de desarrollar tipos de cáncer, daño en las mucosas del aparato digestivo y problemas de alimentación.
Además de las consecuencias personales asociadas a ciertos tipos de enfermedades, también se distinguen ciertas actitudes o hechos que pueden ocurrir cuando una persona no controla la ingesta de alcohol: Vandalismo, peleas, violencia, problemas familiares, aumento de suicidios, disminución de los reflejos y mayor probabilidad de sufrir un accidente.
Para la fecha se realizan diversas actividades en las que se intenta enseñar a los jóvenes las graves consecuencias que pueden llegar a tener si toman alcohol sin control, así como las consecuencias que tienen sus actos en caso de que hagan algo malo estando en el estado de embriaguez.
En muchas ciudades del mundo se realizan jornadas en las que las personas pueden comprobar de primera mano las consecuencias que ha tenido el alcohol en un gran número de víctimas de tráfico cuyos accidentes fueron resultado de una excesiva ingesta de alcohol. Personas en sillas de ruedas, personas con falta de algún miembro del cuerpo, etc. enseñan con su historia lo que no se puede hacer: mezclar la conducción con el alcohol.
La persona que se pone al volante debe de tener todos los reflejos al máximo y no estar bajo los efectos del alcohol, drogas, etc.
Las campañas de prevención del mismo modo intentar concienciar a la población mundial de todas aquellos problemas que generan las adicciones, especialmente el alcohol. Pretender sensibilizar a las padres de la importancia que tiene enseñar a sus hijos los peligros que tiene el alcohol.