El periodista uruguayo Felipe Llambías, colaborador de En Perspectiva, relató desde Hong Kong el ambiente que se vive por estos días en medio de las protestas contra el Partido Comunista que gobierna China. “Los ciudadanos de Hong Kong reclaman sufragio universal y que haya elecciones abiertas”, explicó Llambías el cual aclaró que las protestas, salvo hechos concretos, “se vive con calma, sabiendo que no se trata de una fiesta, pero con tranquilidad”.
Por estas horas el Gobierno de China mira con preocupación los acontecimientos que se suceden en Hong Kong, donde decenas de miles de personas permanecen en las calles desde hace varios, en las protestas más grandes que debe enfrentar el régimen en 25 años.
Luego de siglos de dominio británico, en 1997, y cuando ya se había convertido en uno de los enclaves financieros más importantes del mundo, Hong Kong pasó a manos de China.
A cambio de recuperar su soberanía sobre Hong Kong, China aceptó que allí rigiera un sistema económico y legislativo especial. Entre otras cosas, está vigente el derecho a la libertad de expresión, el gobierno local cuenta con autonomía y están previstas elecciones para elegir a sus autoridades.
Esa concesión implicó todo un cambio para la propia China, que a partir de ese momento se caracterizó por la famosa frase de Deng Xiaoping: “Un país, dos sistemas”.
Pulso al Gobierno de Hong Kong
Para conocer cual fue el detonante del estallido social y qué está pasando ahora en Hong Kong, En Perspectiva se contactó con su colaborador, el periodista Felipe Llambías, que se encuentra allí.
“Las protestas se dispararon porque el Gobierno de China emitió un decreto en el que establece, para las elecciones de 2017, que los candidatos deberán estar autorizados por Pekín” por lo que “van a tener que ser aliados del Gobierno del Partido Comunista y no podrán ser disidentes”.
Los ciudadanos de Hong Kong “reclaman el sufragio universal y que haya elecciones abiertas para que cualquiera participe” pero “eso no está en los planes de Pekín y por eso los estudiantes y muchísimas personas se volcaron a las calles”.
Por otro lado Llambías puso el acento en que las movilizaciones han sido “muy pacíficas, con algunos enfrentamientos puntuales que no pasaron a mayores”. En éstas “la mayor parte involucrada son los estudiantes” pero además está el movimiento Occupy Central que está “tratando de ponerse de acuerdo y llegar a puntos en común para poder unificar las protestas”.
Al cierre de su informe Llambías dijo que lo que está ocurriendo se explica, en parte, porque en Hong Kong “las libertades son más amplias que en el resto de China”. “Todo esto no hubiera ocurrido en China”.
El Espectador