El permiso ha sido suspendido desde el sábado por la noche, lo que ha hecho que decenas de personas que planeaban volar a Venezuela durmieran en ese aeródromo a la espera de una alternativa
En un momento de mayor tensión en las relaciones diplomáticas entre ambos países, las autoridades de Guyana han cancelado el permiso para operar en sus aeropuertos a la aerolínea venezolana Conviasa, lo que dejó en tierra a decenas de pasajeros que pretendían viajar a Caracas.
Según la Autoridad de Aviación Civil de Guyana, el permiso ha sido suspendido ante el impago por parte de la compañía estatal de una cantidad que las aerolíneas han de depositar a modo de fianza por si es necesario indemnizar a los pasajeros varados en caso de que ésta deje de operar de manera repentina.
Roraima Airways, que presta servicios de asistencia en tierra a Conviasa, confirmó a la agencia regional CMC que a la aerolínea venezolana no se le permite aterrizar en el Aeropuerto Internacional Cheddi Jagan desde el sábado por lo noche, lo que ha hecho que decenas de personas que planeaban volar a Venezuela durmieran hoy en ese aeródromo a la espera de una alternativa.
Esta medida tiene lugar en medio de un proceso de mayor tensión de las relaciones diplomáticas entre ambos países vecinos, que se reclaman mutuamente la soberanía sobre ciertos territorios, en su mayoría muy ricos en petróleo y otros recursos naturales.
De hecho, este sábado medios locales publicaron que el ministro de Exteriores de Guyana, Carl Greenidge, planea pedir explicaciones al embajador de Venezuela después de que ese país redibujara sus fronteras marítimas para incluir en su territorio el Esequibo, una rica zona petrolífera que desde hace décadas reclama a Guyana.
Recientemente la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, insistió de nuevo en el derecho de su país sobre ese área de unos 160.000 kilómetros cuadrados, lo que supone unas tres cuartas partes del territorio guyanés y convierte a este conflicto en la mayor disputa territorial del continente.
Hace unas semanas un consorcio liderado por la Exxon Mobil descubrió un gran yacimiento en aguas del bloque Stabroek, un proyecto de 200 millones de dólares que se espera que se prolongue durante 10 años, y que se encuentra dentro de la zona disputada.
Ese área, situada a unos 190 kilómetros de la costa de Guyana, forma parte de la cuenca entre Guyana y Surinam, está reconocida por el Servicio Geológico de EE UU como la segunda mayor área del mundo con petróleo sin explorar.
La exploración está siendo acometida por Esso Exploration and Production Guyana, filial de Exxon Mobil, con un 45 %; Hess Guyana Exploration, con el 30 %, y Nexen Petróleo Guyana, con el 25 % restante.
Fuente: EL Nacional