«La caída del salario es tan brutal que no hay consumo en el país. En el mes de febrero el tipo de cambio estuvo estable, alrededor de 3.300 bolívares por dólar y eso mitigó el alza de precios», destacó el diputado Guerra durante su intervención ante el Parlamento
La inflación mensual se redujo en 137,9 puntos porcentuales en febrero en Venezuela al pasar de 191,6 % en enero a 53,7 % el mes pasado, según la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional (AN), que indicó que pese a ello los precios acumulan un incremento interanual de 2.295.981,8 %.
“La tasa mensual de inflación se ubicó en 53,7 %, sustancialmente menor que la tasa del mes pasado”, dijo el diputado José Guerra, miembro de la comisión, durante una intervención en el Parlamento.
Añadió que el incremento de precios acumulado con respecto a diciembre del año pasado se ubicó en 348,2 % y la interanual en 2.295.981,8 %, luego de que en enero fuese de 2.688.670 %.
“No hay nada que celebrar”, dijo al subrayar que una inflación de 53,7 % es una “catástrofe” para un país.
Guerra, exfuncionario del Banco Central de Venezuela, indicó que la reducción del ritmo de la inflación se debe a la “caída del consumo”, la “estabilización” del mercado de divisas durante febrero y al encaje bancario.
La inflación “baja porque la gente no tiene con qué comprar. La caída del salario es tan brutal que no hay consumo en el país”, indicó Guerra que también recordó que “en el mes de febrero el tipo de cambio estuvo estable, alrededor de 3.300 bolívares por dólar” y eso mitigó el alza de precios.
“En tercer lugar, está el tema del encaje bancario que aplicó el Banco Central de 100 % sobre los depósitos, es decir que el Banco Central controla el crédito, no hay crédito ni para comprar un par de alpargatas, entonces al no haber créditos la economía está totalmente paralizada”, añadió.
Sin embargo, indicó que para la primera semana de marzo la comisión ha observado un repunte de los precios, “en particular durante” el apagón que afectó a casi todo el país por cinco días.
El apagón, explicó, produjo dos cosas: “que algunos productos subieran fuertemente, significativamente de precios y se dolarizará más aún la economía”.
Venezuela, el país con las mayores reservas petroleras probadas del mundo, atraviesa una severa crisis económica traducida, además de hiperinflación, en escasez de medicamentos y fallos en los servicios públicos.
La comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional venezolana empezó a ofrecer en enero de 2017 un índice de precios al consumidor debido a que el BCV llevaba más de dos años sin publicar la inflación y otros indicadores.
La Asamblea elabora el índice con base en los precios de una canasta de bienes y servicios representativa del consumo del venezolano, a la que se le asigna unos pesos relativos, siguiendo la metodología que seguía para confeccionar la Encuesta de Precios que dejó de publicar en 2015.
VF