El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, participó el miércoles en la sesión de la Asamblea Nacional, que también lidera, un día después del encuentro con los sindicatos de los empleados públicos, donde propuso una ley de garantías para proteger a todos los trabajadores estatales que sean víctimas de la persecución política.
La propuesta del orden del día para la sesión del parlamento incluyó, entre otros puntos, un informe sobre la gira reciente de Guaidó a países de la región y un debate sobre la situación que vivió el pueblo indígena Pemón cuando intentaba entrar la ayuda humanitaria en la frontera con Brasil. También fue incluido al debate la situación en las fronteras del país sudamericano.
“Se acabó la petro-diplomacia”, volvió a declarar Guaidó durante su balance de la gira internacional de poco más de una semana y que lo llevó a Colombia, Brasil, Paraguay, Argentina y Ecuador. Agregó que era la hora de “una sana integración”.
Aseguró que durante sus reuniones con los mandatarios de esos países, les pidió ayuda y cooperación, “sin complejo” para los venezolanos, en el plan de avanzar hacia el cese de la usurpación, la transición política en el país y de la cooperación internacional.
El líder opositor confesó que las palabras “regresar” y “volver” le quedaron resonando después de que se reunió con los cientos de venezolanos exiliados en las ciudades que visitó.
Hizo mención a la decisión de la cancillería venezolana de expulsar al embajador alemán en Caracas, Daniel Kriener, y aseguró que los únicos non gratos, en el país y la región era el gobierno del presidente en disputa Nicolás Maduro.
Volvió hacer un llamado a la calle para el próximo sábado 9 de marzo. Para esta fecha, el oficialismo también está convocado a concentrarse.
Como parte de las actividades para continuar la presión al gobierno del presidente en disputa Nicolás Maduro, Guaidó propuso el día anterior la realización de un paro escalonado como parte del plan en relación con los sectores públicos.
«No podemos permitir que la burocracia siga secuestrada. Llegó el momento de cesar a un régimen que oprime a nuestros trabajadores», indicó el martes.
Situación de los pueblos indígenas
Uno de cuatro diputados que hicieron uso de la palabra para tratar el tema de los pueblo indígenas fue la parlamentaria Gladys Guaipo, quien aseguró que no tiene “palabra para describir los hechos que presenciamos nosotros en nuestro pueblo Pemón” el fin de semana del 22 y 23 de febrero en Kumarakapay, ubicada en Santa Elena de Uairén, a pocos kilómetros de Brasil.
Detalló que la primera víctima falleció el viernes 22 en la noche y hasta la fecha han muerto una mujer y seis hombres de esta comunidad indígena.
No dudó en señalar a las fuerzas de seguridad y denunciar presencia de grupos civiles armados cuando los ciudadanos protestaban por la entrada de la ayuda humanitaria.
Guaipo pidió declarar la responsabilidad del gobierno de Maduro ante las instituciones internacionales por las violaciones de derechos humanos contra el pueblo Pemón.
Otro legislador en relatar la situación que vivió ese fin de semana fue Ángel Medina. Destacó la naturaleza pacífica de los pueblos indígenas y aseguró que solo tenían sus dioses y la naturaleza para defendense de los ataques.
Indicó que la frontera lleva 10 días cerrada, lo que afecta directamente la economía de la zona pues está centrada en comercio e importación con Brasil, incluyendo la comida y utensilios básicos.
VOA