El Grupo de Contacto Internacional (GCI) sobre Venezuela, impulsado por la Unión Europea (UE) con países del bloque y latinoamericanos, se reunirá el próximo 28 de marzo en Quito, Ecuador.
La reunión a nivel ministerial tendrá lugar a unos 40 días de que expire el plazo dado el 7 de febrero en una reunión similar del grupo en Montevideo, Uruguay, para conseguir elecciones presidenciales en Venezuela.
«De hecho, me refiero al trabajo del Grupo de Contacto como el único que vale la pena considerar (…) La única iniciativa política existente que tiene acceso ante todo a los diferentes actores dentro de Venezuela», dijo al anunciar la reunión la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, en un video divulgado en su cuenta de Twitter.
«I actually refer to the works of the Contact Group as the only game in town. […] The only existing political initiative that has first of all access to all the different stakeholders inside Venezuela» @FedericaMog #FAC pic.twitter.com/SdLFeewEN0
— European External Action Service – EEAS ?? (@eu_eeas) 18 de marzo de 2019
El organismo había informado que una misión técnica se reunió el pasado 21 y 22 de febrero con el canciller del gobierno en disputa, Jorge Arreaza, con la oposición y miembros de la sociedad civil.
Los cancilleres de la UE, España, Portugal, Italia, Alemania, Reino Unido, Francia, Países Bajos y Suecia, así como Uruguay, Ecuador, Costa Rica y Bolivia, también habían acordado en febrero en Montevideo trabajar en función de la entrada de ayuda humanitaria al país, un objetivo que tampoco se ha cumplido.
«El GCI estudia la posibilidad de establecer un mecanismo internacional de coordinación y prestación de ayuda humanitaria en Venezuela en estrecha cooperación con la ONU», dijo el martes Neven Mimica, responsable europeo de Cooperación Internacional y Desarrollo.
Abogó porque «actores independientes bajo el liderazgo de Naciones Unidas» distribuyan la ayuda de forma «imparcial» y «despolitizada».
El GCI ha seguido de cerca la severa crisis que vive Venezuela que se agravó tras el segundo mandato asumido por el presidente en disputa Nicolás Maduro el 10 de enero pasado.
La juramentación del presidente encargado Juan Guaidó el 23 de febrero puso presión a la situación política en la nación sudamericana. Decenas de países apoyan a Guaidó mientras Maduro continúa respaldado por los altos mandos militares de su país y por un grupo de países que incluye entre otros a China, Rusia, Turquía, Cuba y Bolivia.
La UE no reconoce las elecciones de mayo de 2018 en virtud de las cuales Maduro asumió un segundo mandato y aboga porque se celebre otra elección presidencial que sea «libre, justa, inclusiva y transparente».
voa