El uso de hoteles para cuarentenas en la era del coronavirus es ya una práctica establecida en países como Australia, Nueva Zelanda, China, India y Singapur, pero no en Europa
Gran Bretaña considera la posibilidad de pedir a todo el que llegue del extranjero a colocarse en cuarentena en un hotel a su propia expensa, a fin de frenar la propagación de la nueva variante del coronavirus.
El ministro para vacunas Nadhim Zahawi dijo que darán una conferencia de prensa para anunciar restricciones de entrada al país. La BBC reportó que ciudadanos británicos y viajeros procedentes de África del sur y de América del Sur, así como Portugal, tendrán que quedarse en un hotel por 10 días a cuenta propia.
El uso de hoteles para cuarentenas en la era del coronavirus es ya una práctica establecida en países como Australia, Nueva Zelanda, China, India y Singapur, pero no en Europa.
Zahawi no dio detalles del anuncio por venir, pero afirmó que limitar la entrada al país “es lo correcto porque … a medida que vamos vacunando a la población adulta, si surgen variantes como la de Sudáfrica o la de Brasil, debemos tener mucho cuidado”.
La oposición y varios funcionarios de salud pública han criticado al gobierno conservador británico por no haber cerrado las fronteras al inicio de la pandemia.
Las normas de confinamiento actuales, impuestas para frenar la nueva variante más contagiosa identificada inicialmente en el sudeste de Inglaterra, prohíben a los británicos salir al exterior para vacaciones, aunque se permiten los viajes indispensables.
Los que llegan del exterior están obligados a permanecer en aislamiento, pero la norma no se hace cumplir estrictamente.
El exsecretario de salud Jeremy Hunt estimó que el problema principal es que mucha gente que ya está en Gran Bretaña no acata las normas de aislarse.
“Creo que el gran problema no son las 10.000 personas que llegan al Reino Unido cada día sino las 30.000 que ya están dentro del país y que tienen la obligación de aislarse y no lo hacen”, expresó Hunt a la BBC.
AP