Google Bard supone un peligro para Google, llegando al punto que la empresa ha prohibido a sus trabajadores utilizar este chatbot con IA.
Google Bard no está disponible en Europa por motivos de seguridad, el movimiento de bloqueo por parte de la Unión Europea coincide con lo que piensa Google acerca de su chatbot y los de la competencia: no son seguros. Sí, Alphabet ha dejado claro que ningún chatbot es seguro lo que puede suponer problemas de filtraciones.
El nivel de desconfianza es tal que han comunicado al equipo que trabaja para Google que lo recomendable es no utilizar ningún tipo de chatbot, ni siquiera Bard. Está claro que las empresas quieren proteger la seguridad de sus proyectos y que estos no sean filtrados, pero resulta interesante ver cómo ofrecen estos chatbots al resto de los usuarios.
Puede que los datos de los usuarios no tengan tanta importancia como los de estas empresas o, al menos, esto es lo que da a entender Google. No es la primera vez que una empresa muestra reticencia hacia un chatbot, Apple prohíbe a sus trabajadores utilizar cualquier tipo de chatbot como ChatGPT para evitar que sus datos se filtren.
Han sido fuentes internas de Alphabet las que han comunicado a Reuters que la compañía indica a sus trabajadores no emplear ningún tipo de chatbot con IA y mucho menos realizarle cuestiones que impliquen información sobre la empresa. El principal problema que se puede presentar es que los chatbots generen información utilizando estos datos.
Google no se fía de ningún chatbot, incluyendo a Bard
Utilizar la Inteligencia Artificial en el día de día es una realidad para muchos trabajadores, aunque esto signifique poner en peligro la información de la empresa. Detrás de la inteligencia artificial de estos chatbots se encuentras personas que revisan la información o que, al menos, la clasifican para luego alimentar de nuevo el conocimiento de estos chatbots.
Parece que la Inteligencia Artificial es un arma de doble filo para las empresas, siendo una nueva forma de aventurarse a un sector todavía en desarrollo y que puede suponer un peligro para el desarrollo de la propia empresa. Teniendo esta situación en mente es de vital importancia tomar las mismas precauciones que las empresas.
Los chatbots con IA son interesante y pueden servir como herramientas para realizar tareas varias, pero es imprescindible ofrecerles la mínima información personal ya que se desconoce por completo cómo se utilizarán estos datos por parte de las empresas que se encuentran detrás ya sea Google con Bard u OpenAI con ChatGPT.
ComputerHoy
